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Susan George: el agua puede ser el “perfecto producto capitalista”

25 junio 2008

 

lunes 23 de junio, 01:15 PM

Zaragoza (España), 23 jun (EFE).- La escritora y analista política de origen estadounidense Susan George alertó hoy de que el agua puede ser "el perfecto producto capitalista", al tratarse de un recurso insustituible y que no se puede generar, y por ello insistió en que debe estar bajo control público, gubernamental y social.

Susan George intervino hoy en la Tribuna del Agua, en el marco de la Exposición Internacional de Zaragoza, un espacio de debate en el que presentó un ensayo que lleva por título el mismo lema de la muestra "Agua y desarrollo sostenible", y que forma parte de la colección "Palabras de Agua".

 

Según la autora de "El pensamiento secuestrado", el agua es un recurso "indispensable, insustituible y que no se puede generar", que se necesita cada día, con una demanda creciente y una oferta del mismo cada vez menor, y con estas características cualquier hombre de negocios "querría controlarlo para poder venderlo porque el precio no dejará de subir".

 

En este sentido, lamentó que puede llegar a ser "el perfecto producto capitalista" cuando en realidad es "un bien público y universal, algo con lo que nacemos y es gratis", por lo que en su opinión debe estar "bajo control público", tanto gubernamental como social y popular, y no en manos de las grandes multinacionales.

 

Recordó que según la Organización Mundial de la Salud un ser humano necesita cada día para cubrir sus necesidades 50 litros de agua, y Susan George dijo que si ella gobernara el mundo garantizaría esa cantidad a todas las personas y a partir de ahí "el precio aumentaría de forma exponencial".

 

También lamentó la "desigualdad geográfica" que sufre este planeta en cuanto a cantidad de agua disponible por los ciudadanos de diferentes países, un problema "que hay que encarar" más aun cuando las previsiones apuntan a que en el año 2030 dos tercios de la población mundial vivirán en zonas en las que habrá problemas de distribución de este recurso.

 

Por ello, insistió en que el agua es "un bien universal" con "características económicas únicas", con "problemas de distribución, para el futuro", un recurso que debe gestionarse desde la cooperación entre países, estar bajo control público y mantener "su aspecto sagrado".

 

"No se debe permitir que se reduzca al estatus de mercancía en un mercado", concluyó. EFE