Cuencas Hidrográficas
¿Qué es una cuenca?
La cuenca es el área geográfica por donde transita el agua hacia una corriente principal y luego hacia un punto común de salida, es también el territorio en el que ocurre el ciclo hidrológico. Debido a lo anterior se considera la cuenca como la unidad geográfica más funcional para administrar el agua. Estas concavidades que la naturaleza ha creado en la superficie de la tierra mediante las fuerzas tectónicas, la fuerza del agua, los tipos de suelos y la vegetación, pueden extenderse desde algunos kilómetros cuadrados hasta cientos o miles.
Las cuencas son además los espacios geográficos donde los grupos y comunidades comparten identidades, tradiciones y cultura, y donde socializan y trabajan en función de la disponibilidad de recursos renovables y no renovables. En las cuencas, la naturaleza obliga a reconocer necesidades, problemas, situaciones y riesgos hídricos comunes, por lo que debería ser más fácil coincidir en el establecimiento de prioridades, objetivos y metas también comunes y la práctica de principios básicos, como el de corresponsabilidad y el de solidaridad en el cuidado y preservación de los recursos naturales, que permitan la supervivencia de la especie.
La cuenca es un concepto geográfico e hidrológico que se define como el área de la superficie terrestre por donde el agua de lluvia, nieve o deshielo escurre y transita o drena a través de una red de corrientes que fluyen hacia una corriente principal, y por ésta hacia un punto común de salida. Éste puede ser un almacenamiento de agua interior, como un lago, una laguna o el embalse de una presa, en cuyo caso se llama cuenca endorreica. Cuando las descargas llegan hasta el mar se le denomina cuenca exorreica. Normalmente la corriente principal es la que define el nombre de la cuenca.
Gestión del agua
“Gestión” es un término que se usa para definir un proceso generalmente administrativo, normativo o regulatorio. En su sentido más amplio se refiere al conjunto de actividades, funciones, formas de organización institucional de organismos de gobierno y no gubernamentales, recursos e instrumentos de política y sistemas de participación relacionados con uno o varios objetivos que definen su sentido y objeto. Esto significa que no hay gestión sin objetivos, neutral ni general.
Por el contrario, la “gestión” como proceso administrativo o de conducción y regulación sólo tiene sentido si se le asocia a objetivos y funciones o recursos concretos.
El concepto de cuencas para la administración ayuda mucho en el aspecto de conservación de la naturaleza, ya que un servicio ambiental indispensable que proveen las cuencas y sus ecosistemas naturales es el agua. Si las personas que viven en determinadas cuencas no las conservan, serán afectadas de inmediato con la carencia del recurso; es decir, es necesario que las personas conozcan la cuenca donde viven, el origen del agua que beben y la importancia de conservar la cuenca en buen estado, de conservar sus ecosistemas.
Las cuencas como unidad territorial y ecológica facilitan el manejo del agua, pero a veces lo complican; un problema frecuente que presenta esta unidad de administración, es que no coincide con los límites sociopolíticos en los que se dividen los territorios; municipios, estados, provincias e incluso países comparten muchas veces, una misma cuenca.
Enfoque de cuencas
Considerando que las cuencas son el territorio delimitado por el relieve, en el que la dinámica del agua se vincula con el funcionamiento de los ecosistemas y las actividades que desarrollamos como sociedad, el enfoque de cuencas, es fundamental para llevar a cabo una gestión integral del agua; ésta puede definirse como el conjunto de actividades, funciones, organización, recursos, instrumentos de política y sistemas de participación aplicados a una cuenca.
Aspectos de la gestión integral del agua
- La medición de las variables del ciclo hidrológico y el conocimiento de sus características determinantes y consecuencias
- La explotación, uso, aprovechamiento, manejo y control del agua
- La prevención y mitigación de desastres naturales asociados a la presencia de fenómenos hidro-meteorológicos.
- La construcción, mantenimiento y operación de obras hidráulicas y la administración de los servicios asociados a ellas
- El mantenimiento, operación y administración de distritos y unidades de riego
- El control de la calidad del agua y su saneamiento
Consiste en armonizar el uso, aprovechamiento y administración de todos los recursos naturales (suelo, agua, flora y fauna) y el manejo de los ecosistemas comprendidos en una cuenca hidrográfica, tomando en consideración las relaciones entre recursos y ecosistemas, los objetivos económicos y sociales y las prácticas productivas y formas de organización que adopta la sociedad para satisfacer sus necesidades y procurar su bienestar en términos sustentables. Fuente: www.cna.gob.mx En el mundo moderno, casi todos los países reconocen a las grandes cuencas hidrográficas como los territorios más apropiados para conducir los procesos de manejo, aprovechamiento, planeación y administración del agua y, en su sentido más amplio, como los territorios más idóneos para llevar a cabo la gestión integral de los recursos hídricos.
Gestión del agua en México
La Conagua, órgano administrativo, normativo, técnico y consultivo encargado de la gestión del agua en México, desempeña sus funciones a través de estos 13 organismos de cuenca, cuyo ámbito de competencia son las regiones hidrológico-administrativas.
El país se ha dividido en 13 regiones hidrológico-administrativas, las cuales están formadas por agrupaciones de cuencas, consideradas las unidades básicas de gestión de los recursos hídricos, sus límites respetan los municipales, para facilitar la administración e integración de la información socioeconómica.
Cuencas de México
Distintas metodologías se han utilizado para delimitar las cuencas del país. De hecho aún considerando criterios meramente orográficos, la delimitación de estos espacios dependerá de la escala a la cual se está trabajando.
En principio una cuenca, es el territorio delimitado por una serie de cadenas montañosas de grandes dimensiones. A su vez, el relieve al interior de esa cuenca, puede delimitar unidades menores por las que escurre el agua. Así para los fines de formulación y ejecución de las políticas públicas relacionadas con el manejo y administración del agua, se consideran tres niveles fundamentales de cuenca: las macrocuencas que corresponden a grandes sistemas hidrográficos, las subcuencas o cuencas de segundo orden, y un tercer nivel que puede denominarse microcuencas.
En México, se han delimitado 1,471 cuencas hidrográficas que, con propósitos administrativos la Comisión Nacional del Agua (Conagua) ha agrupado en 731 cuencas, que a su vez conforman 37 regiones hidrológicas, nuevamente agrupadas en 13 regiones económico-administrativas.
Por su parte, el Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático (“Cuencas hidrográficas de México. Diagnóstico y Priorización” Cotler, 2010), las agrupó en 393 cuencas regionalizadas de acuerdo a sus características socio ambientales y económicas.
El complejo entramado natural, social y político del agua representa un gran reto de legislación que deberá ser considerado en el diseño de la nueva Ley General de Aguas.
Algunas de las más importantes cuencas exorreicas corresponden a los grandes ríos nacionales: Lerma, Santiago, Balsas, Bravo, Pánuco, Papaloapan, Coatzacoalcos, Grijalva, Usumacinta, Mayo, Yaqui y otros de menor tamaño. Cada uno de estos ríos tiene corrientes alimentadoras que se forman con las precipitaciones que caen sobre sus propios territorios de drenaje, a las que se les llama cuencas secundarias o subcuencas. A su vez, cada subcuenca tiene sus propios sistemas hidrológicos que alimentan sus caudales. Estas son cuencas de tercer orden. Así, sucesivamente, hasta territorios muy pequeños por los que escurre el agua sólo durante las temporadas de lluvia y por períodos muy cortos de tiempo. (Fuente: www.cna.gob.mx)
En octubre de 2009, el Instituto Nacional de Ecología y Centro Geo, presentaron el Sistema de Consulta de Cuencas Hidrográficas de México , una herramienta muy útil mediante elcual se puede conocer la distribución natural del agua en las distintas cuencas hidrológicas que conforman la República Mexicana: los principales ríos y arroyos que las integran, qué centros de población incluyen, el grado de deforestación y su repercusión en el medio ambiente, las vías de comunicación, así como los estados y municipios que las conforman, entre otros aspectos. Con esta interfase se puede comprender mejor cómo el agua es compartida por varias regiones y cómo en cada una de ellas se le da un uso distinto: agrícola, urbano o industrial, además de que nos permite darnos cuenta de cómo el agua que usamos es reutilizada por plantas, animales y seres humanos.
Conoce tu cuenca
Con el objetivo de acercar a nuestros usuarios con el agua de su entorno, hemos creado, una herramienta con la cual podrás informarte sobre el origen y destino del agua que usas, la disponibilidad y sus usos, los actores clave que intervienen en su gestión, los problemas y riesgos así como las propuestas y alternativas para su aprovechamiento sustentable.