Familias africanas sufren carestía y suciedad del agua
30 julio 2008Nairobi, Kenia
28 de julio de 2008
Información de Oscar Campos
Internacional
Fuente: Tv Azteca
Las preocupaciones mundiales: seguridad, salud y agua crean estrés y angustia en las poblaciones. En Kibera, África, el agua está sumamente contaminada, sus habitantes han encontrado una solución para matar los microorganismos.
Kibera es la segunda ciudad perdida más grande de África, es una favela monumental donde sobreviven más de un millón de personas y está ubicada en pleno centro de la capital de Kenia.
Y como ocurre en otros barrios similares, las mayores preocupaciones son la seguridad, la salud y el agua.
Según una activista, en dicha ciudad "hay niveles muy altos de suciedad, que pueden desarrollar la bacteria de E. Coli, un gran riesgo para la salud".
En Kibera, por una extraña decisión del gobierno, la gente tiene que pagar tres veces más por el agua que en barrios más ricos.
Y a pesar de ello, el líquido que corre por las tuberías está contaminado con los desechos de Nairobi, beberlo es casi una sentencia de muerte.
Amina Hassan, una habitante de ésta ciudad señala que sus hijos se han enfermado por las diarreas constantes que ocasiona beber el agua que llega a sus hogares.
La única solución posible tenía que surgir de los mismos habitantes y resultó ser muy simple.
Hassan llena botellas de plástico con el agua hedionda que yace en pozos y tuberías y la coloca al sol. En verano, bastan 6 horas para que el calor y los rayos ultravioleta maten los microorganismos que pululan allí.
Después del tratamiento, el peligro desaparece. Aunque es una solución minima, es la única opción en una ciudad que ha vivido décadas de negligencia gubernamental.