Ahora el agua asedia a Australia

17 febrero 2009

Fuente: AP

Martes, 17 de febrero de 2009

Declararon el estado de alerta por inundaciones en el norte de Sydney. Científicos argumentan que las condiciones meteorológicas se han visto exacerbadas por el cambio climático.

Las autoridades pusieron helicópteros en estado de alerta el martes mientras desalojaban a residentes de casas inundadas en el norte de Sydney, mientras continuaban incendios en el sur del país, azotado por sequía.

La populosa costa este de Australia ha estado asediada por condiciones meteorológicas extremas de sequía ardiente y lluvias torrenciales que los científicos argumentan que se han visto exacerbadas por el cambio climático.

La región Bourke del estado de Nueva Gales del Sur fue declarada el martes zona de desastre luego que 20 casas y varios edificios de gobierno se inundaron, dijo Phil Campbell, vocero del Servicio Estatal de Emergencia.

Las inundaciones también aislaron aproximadamente a 5.000 personas en poblados, villas y granjas en la parte norte del estado, señaló.

El río Bellinger se desbordó el martes, ocasionando la evacuación de casas y negocios en Bellingen, que tiene una población de 3.000 residentes, y de comunidades río abajo, dijo el oficial de policía Shane Cribb. Al esperarse más lluvia el miércoles, el riesgo de inundación no ha pasado.

"Nos aseguraremos de tener helicópteros suficientes así como voluntarios y botes en esa región para responder a cualquier solicitud de evacuación de emergencia", dijo Campbell.

Hacia el norte, la mayor parte del estado de Queensland ha estado bajo el agua durante semanas por la peor inundación en tres décadas, mientras que se espera más lluvia durante la temporada monzonal tropical.

Han muerto siete personas, cientos están sin vivienda y docenas de miles de cabezas de ganado están muriendo de hambre en zonas vastas del estado que se asemejan a un mar interior.

Con las inundaciones afectando 62% del estado, el gobierno local señaló el martes que el daño podría ser superior a 210 millones de dólares australianos (136 millones de dólares estadounidenses).

Al sur de la frontera de Nueva Gales del Sur, los bomberos del estado de Victoria han tenido poca lluvia para ayudarlos a combatir los incendios forestales que han costado la vida de 200 personas hasta el martes.