Uagadugú, capital de Burkina Faso, necesita ayuda. Durante los primeros días de septiembre la capital sufrió fuertes precipitaciones que ocasionaron graves daños en el país. Se inundó el 50% de la capital y resultaron afectadas más de 150.000 personas, que tras perder sus casas han tenido que refugiarse en colegios o lugares de culto.

El problema es que, en estos lugares, existen grandes riesgos de degradación sanitaria. La ONG 'Acción contra el Hambre', junto a otras instituciones como el gobierno local o el Ministerio de Exteriores español, está construyendo 12 centros de acogida que alojarán a unas 6.000 personas afectadas en la capital.

El proyecto de la ONG se complementa con la habilitación de un sistema de saneamiento suficiente y decente que garantice a la población el acceso a una higiene básica. El plan consiste en instalar 150 letrinas así como áreas de limpieza y duchas en los próximos días. Se distribuirán también 'kits' de higiene entre los afectados. La organización se ocupará igualmente de que los centros dispongan de un acceso al agua suficiente, al menos 15 litros por persona y por día.

Estas precipitaciones pueden calificarse como las más importantes en el país en los últimos años ya que las últimas lluvias torrenciales de un carácter similar tuvieron lugar en 1914. Además, las infraestructuras del lugar no están suficientemente preparadas para enfrentarse a un acontecimiento de esta envergadura. El resto de países vecinos también se ha visto afectado por las precipitaciones y más de 600.000 personas tendrán las mismas dificultades en toda África Occidental.