“Tomamos de esta agua, esta así por la basura que le cae del viento, hay que removerla porque sino nos tomamos todo eso”.

La limpian un poco, pero no es suficiente, señala Francisco Montoya, uno de los campesinos.

A esto los ha orillado la sequía que se registra en México y que ha pegado con más intensidad en el norte del país.

Ellos son pobladores de la comunidad de La Boquilla, la cual se ubica en el sur de Nuevo León, en el municipio de Doctor Arroyo.

Ante la escasez, los pobladores tienen que beber de esta agua, aunque en la mayoría de los casos es la causante de muchas de sus enfermedades.

“Se enferman del estómago por tomar esa agua”, recuerda Gerardo Farías, quien comparte opinión con Francisco Montoya. “Les da diarrea, dolor de estómago y varias cosas más”.

La Secretaría de Desarrollo Social de Nuevo León reporta que durante el 2012 han entregado apoyos a cerca de 200 mil habitantes de 43 municipios que enfrentan esta situación. Pertenecen a 43 mil familias de 2 mil 024 localidades.

El ganado no corre mejor suerte, señala Asención Hernández.

“Se mueren por lo mismo, por la sequía, comen pura cosa seca, el veterinario dice que porque comen pura cosa reseca”.

En medio del campo árido se encuentran los esqueletos de las reses.

El presidente de la Unión Regional Ganadera de Nuevo León, Adrián de la Garza, dio a conocer que en los últimos dos años 100 mil cabezas de ganado han muerto a causa de la falta de agua, alimento y temperaturas que en la entidad alcanzan los 40 grados centígrados.

Por su parte los agricultores reportan que en los últimos meses han dejado de cosechar el 60 por ciento de las hectáreas de tierra destinados para estas tareas.

En medio de esta situación, las autoridades de Nuevo León buscan que 43 municipios se beneficien con la declaratoria de “sequía severa” que emite el gobierno federal.

De aprobarse, en breve estos pobladores comenzarán a recibir apoyos para contrarrestar los efectos de la sequía.