Pueblo Yaqui pide a Segob que no los dejen sin agua
25 abril 2013En entrevista, el integrante del Movimiento del Pueblo, Comunidades y organizaciones indígenas del Distrito Federal, Antonio Salas, informó que el Juzgado Décimo de Distrito en Sonora otorgó a la tribu Yaqui un amparo y protección contra el manifiesto de Impacto Ambiental que autoriza las obras del Acueducto.
Expuso que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) deberá determinar si la edificación de esa obra viola los derechos humanos de los yaquis, dado que además de despojarlos del agua, desprotege el territorio y los bienes naturales de ese pueblo.
El acueducto tiene un costo de 3,860 millones de pesos, inició su construcción a finales de 2010 para llevar 75 millones de metros cúbicos de agua anuales del Río Yaqui, en la presa Plutarco Elías Calles, El Novillo, hasta la ciudad de Hermosillo, a través de 172 kilómetros de tubería de acero.
Salas denunció que el gobierno sonorense “se está robando el agua de la tribu Yaqui. La semana pasada ya se traspasaba el agua de un lugar a otro y eso está prohibido, es ilegal porque no tienen ni las licitaciones, ni los permisos”.
Precisó que la tribu tienen un amparo que ganó jurídicamente en la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), pero se ha detenido por intereses nacionales, trasnacionales y económicos.
“El gobierno de Sonora insiste en que es necesaria el agua para Hermosillo las 24 horas pero esto no puede ser, porque no le pueden quitar agua a un pueblo”, enfatizó.
A su vez, el joven de la tribu yaqui, Fabricio Catene, informó que el agua del Río Yaqui beneficia a una población de 40,000 habitantes de los ocho pueblos y dos colonias, por lo que están dispuestos a defender con la vida lo que les pertenece.
“Históricamente la tribu ha defendido el territorio Yaqui, el agua y nuestros recursos prácticamente con la vida”, expuso Catene, al recordar que la lucha de su pueblo la apoyan también jóvenes de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y de la Escuela Nacional de Antropología e Historia (ENAH).
Esa, agregó, “es la ley de nuestros mayores, de que aun así quede un solo yaqui, ése será el responsable de guardar todo el territorio y nuestras costumbres, por eso, hasta que no quede un último yaqui vamos a dejar de resistir”, advirtió.
