El asesinato de especies y el ataque al manglar de Tajamar provocan ira e indignación
20 enero 2016Ciudad de México, 19 de enero (SinEmbargo).- “La destrucción del manglar [Tajamar] no es un asunto trivial, pues la devastación de 57 hectáreas de terreno que luchaba por sobrevivir debe mover conciencias”, planteó Miguel Alejandro Rivas Soto, campañista de Océanos de Greenpeace, quien a nombre de la organización condenó el ecocidio en Cancún y responsabilizó tanto al Gobierno federal como al que encabeza el priista Roberto Borge Angulo en Quintana Roo.
La destrucción del manglar fue autorizada por el Gobierno federal y las autoridades municipales y estatales. Como la comunidad local se oponía, una brigada de policías y de maquinaria pesada ingresó a esa zona y empezó su destrucción. A la mañana siguiente, el daño era casi irreparable. Activistas dicen que en su prisa por acabar con la población vegetal y animal, los equipos sepultaron especies vivas.