Prepara Hacienda amnistía fiscal para Tabasco, anuncia Calderón
05 noviembre 2007Gobernación reporta saldo blanco, pero investiga la causa de la muerte de dos personas
Damnificados se quejan de falta de víveres, así como de reparto de alimentos descompuestos
Acaparan despensas algunas personas: Granier; se instalarán cocinas en zonas anegadas, dice
Villahermosa, Tab., 4 de noviembre. Ante el colapso que vive la planta productiva de Tabasco a consecuencia de las inundaciones en amplias zonas del estado, el presidente Felipe Calderón anunció que el gobierno federal prepara un programa de “amnistía fiscal” que permita, en el marco de la ley, una rápida recuperación.
Agregó que el convenio mediante el cual la Federación acordó absorber 50 por ciento de la deuda de los tabasqueños con la Compañía Federal de Electricidad (CFE), que representa 3 mil cien millones de pesos, “ha quedado totalmente rebasado”, por lo que dicho porcentaje podría aumentar.
“No sé cuánto, pero hay que entrarle; tenemos que expresar nuestra solidaridad con Tabasco en pesos y centavos con esa deuda y esa carga”, respondió a la solicitud expresa del gobernador Andrés Granier de que el gobierno federal absorba totalmente la deuda.
Por otra parte, la Secretaría de Gobernación informó que hasta el momento se reporta saldo blanco y más de 24 mil personas atendidas en los refugios temporales administrados por la Secretaría de la Defensa Nacional.
Sin embargo, reconoció que se investiga la causa de la muerte de dos personas, cuyos cuerpos fueron encontrados en la laguna cercana a la colonia La Manga.
“Se retoma el control”
Tras recibir los últimos reportes sobre la reducción en los niveles de agua de los ríos del estado, la normalización del abasto, las acciones de control epidemiológico, la distribución de ayuda y atención médica, la instalación de albergues, la normalización en instituciones bancarias, la reparación de tramos carreteros y el restablecimiento paulatino del servicio de agua potable y la corriente eléctrica, el presidente Calderón aseguró que “poco a poco se está retomando el control de la situación”.
En una reunión de evaluación realizada en uno de los hangares del aeropuerto de esta ciudad, en el inicio de su tercera visita a esta entidad en la última semana, el titular del Ejecutivo insistió en que, frente a una de las “peores catástrofes naturales” en la historia moderna del país, en Tabasco “no debe haber banderas ni colores; aquí sólo hay una bandera, que es la nacional, y hay un solo pueblo, que está unido por encima de diferencias, de religión, de región o de otro símbolo”.
Agregó: “quiero pedir encarecidamente que en estos momentos de dolor los mexicanos tengan un espíritu fraterno (…) que nos una verdaderamente en la idea de reconstruir Tabasco, de proteger y de salvar vidas, que no sea motivo de división o de encono entre los mexicanos; que no haya propósitos de usufructo político, que no se comercie políticamente con esta tragedia”.
En la mañana, en el puerto de Acapulco, Guerrero, al recibir al buque escuela Cuauhtémoc, que zarpó hace seis meses, el Presidente también se refirió al tema.
“Hoy más que nunca es imperativo dejar a un lado las discrepancias y los intereses parciales para salvaguardar el interés de la nación, que se expresa precisamente en el interés de auxiliar a la población de Tabasco.”
Ante los secretarios de la Defensa Nacional y de Marina, quienes lo acompañaron en todas las actividades, agradeció la solidaridad expresada por los mexicanos en todo el país, y anunció la aceptación de la ayuda y el apoyo internacional para enfrentar este gravísimo problema.
En Villahermosa, además de la reunión de evaluación, Calderón sobrevoló varias zonas afectadas; repartió personalmente algunas despensas, en medio de la desorganización, el caos y falta de pañales y leche para niños; supervisó la instalación de un albergue militar y recorrió la Quinta Grijalva –casa de gobierno–, habilitada como centro de acopio y distribución de víveres.
En la reunión de evaluación, en la que prácticamente estuvieron todos los funcionarios federales vinculados con el sistema de seguridad pública y de atención social, el gobernador Granier solicitó al Presidente que el gobierno federal absorba totalmente la deuda en materia eléctrica, que los tabasqueños no paguen luz en los próximos tres meses, que haya apoyos para el pago del IVA y las cuotas al IMSS, además de diversos respaldos en materia social.
La respuesta fue parcial, y Calderón informó que desde el viernes pasado había dado instrucciones al secretario de Hacienda, Agustín Carstens, de preparar un programa de amnistía fiscal para Tabasco, acorde con las necesidades que vive la planta productiva, aunque aclaró que se deberá actuar dentro de lo que permite la ley.
Este lunes, reinicio de clases
Este domingo siguió descendiendo el nivel de los ríos Grijalva, Carrizal, La Sierra, Pichucalco y Samaria, causantes de la contingencia. En este contexto, la secretaria de Educación de la administración local, Rosa Beatriz Luque Green, anunció que este lunes se reiniciarán las clases tanto en los albergues como en las zonas que no fueron afectadas por las inundaciones.
Con base en la disposición de los maestros, abundó, se reanudarán las clases en los albergues, donde los docentes atenderán a los niños y jóvenes, por lo que es necesario que profesores se reporten con sus directores y supervisores, para la coordinación de actividades.
Mientras, en la carretera Cárdenas-Villahermosa se normalizó al tránsito de vehículos, y el aeropuerto capitalino realizó sus vuelos de manera normal.
No ocurrió lo mismo con el servicio de agua potable, pues aunque se ha dicho en los medios electrónicos que se había normalizado, el problema persiste en las colonias de Villahermosa.
A pesar de que siguen llegando miles de despensas de distintos puntos de la República, en algunos albergues priva la inconformidad de los damnificados, que alegan falta de víveres y se quejan que les reparten alimentos descompuestos.
De su lado, Granier Melo recorrió este domingo los centros de acopio, donde lamentó que algunas personas estén acaparando las despensas. Indicó que hay algunos que se forman dos y hasta tres veces, por lo que dejan sin víveres a otros damnificados.
Mencionó que en estos momentos la prioridad de su gobierno es restaurar el tránsito en las carreteras, para que entren los camiones que abastecen de alimentos y agua purificada a los supermercados.
Dio a conocer que se instalarán cocinas cerca de las zonas anegadas para proporcionar alimentos a personas que no se encuentran en albergues, lo cual además generará trabajo como parte del programa de Empleo Temporal de la Secretaría de Desarrollo Social.
A su vez, Protección Civil reportó que más de 38 mil personas han sido evacuadas vía aérea de zonas inundadas, mientras el número de refugiados en albergues se incrementó a más de 70 mil.
Fuente: La Jornada