Analiza Tribunal Latinoamericano del Agua violaciones ambientales
17 octubre 2007No sólo sirve para beber. El agua potable es primordial para la armonía de las comunidades.
Es el caso de Juanacatlán, en el estado de Jalisco. El señor José Antonio habita aquí desde hace 51 años. Ha visto cómo la descarga de desechos de casas, negocios e industrias de seis localidades, han provocado que el Río Santiago pierda claridad y su relación con la gente.
José Antonio Luévanos Mendoza, habitante de Juanacatlán, Jalisco, dijo: “aquí me enseñé a nadar y el río nos dio de comer a muchos, aquí salió mojarra, pescado, carpa, yo creo que era muy generoso”.
El Instituto Vida, creado por expertos de la Universidad de Guadalajara y colonos del Río Santiago, realizó análisis químicos del sitio y los presentó a la Comisión Nacional del Agua.
Rodrigo Saldaña, presidente del Instituto de Valores Integrales y Desarrollo Ambiental (VIDA), expresó: “todos los expertos a nivel nacional y a nivel internacional que han visitado aquí, que conocen de esto, nos dicen que estamos en uno de los ríos más contaminados del mundo. Todos los parámetros que marcan las normas oficiales mexicanas están rebasados desde un 100, hasta un 5 mil, o hasta 12 millones de veces por arriba de la norma”.
Juanacatlán y la vecina comunidad El Salto, han resentido en su salud la contaminación del río.
Raquel Gutiérrez Nájera, presidenta del Instituto de Derecho Ambiental de Guadalajara, comentó: “fíjate que los niños, principalmente derivado de la contaminación, dolores de cabeza, vómitos, nauseas, dermatitis. Cuando vemos en El Salto y Juanacatlán que en los últimos dos años, los casos por muerte de cáncer han sido escandalosas, si tomamos en cuenta de que por mes por lo menos hay uno o dos muertes por cáncer”.
Después de cinco años de estudios y gestión ante autoridades, aún no hay acciones para resolver el problema del río. Para agilizar su rescate, los interesados decidieron llevar su caso ante el Tribunal Latinoamericano del Agua, el cual no tiene capacidad para sancionar, pero su fallo tiene peso ético y moral.
Se creó en 1999 por expertos latinoamericanos en derecho ambiental, procuración de justicia, magistrados internacionales, epidemiólogos, economistas, agrónomos, ingenieros químicos y biólogos. Estudia casos de violaciones ambientales como la del Río Santiago, para emitir recomendaciones.
Javier Bogantes Díaz, director del Tribunal Latinoamericano del Agua, declaró: “las comunidades han acudido al tribunal, porque de alguna forma hay una situación de frustración, hay una situación de impotencia donde han acudido a las leyes de diferentes países de América Latina, pues esas leyes no solucionan sus problemas. Hay una crisis de legalidad que repercute en una crisis ambiental”.
En la última sesión que se realizó en Guadalajara, el tribunal analizó siete casos, cuatro de ellos mexicanos. En todos, sugirió a particulares y gobiernos realizar acciones para frenar el deterioro ambiental.
En la minera canadiense San Javier, instalada en San Pedro en el estado de San Luis Potosí, recomendó al gobierno mexicano ordenar el cese de las operaciones de la empresa, y a ésta, indemnizar por el daño ambiental que ha generado con el empleo de cianuro.
Juan Carlos Ruiz Guadalajara, del Frente Amplio Opositor de Minera San Javier, indicó: “ellos utilizan ya en este momento porque tienen ya tres meses que comenzaron a lixiviar a costa de las leyes, 32 millones de litros de agua del acuífero profundo mezclado con 16 toneladas de cianuro al día”.
El Tribunal del Agua atiende casos donde considera que la negligencia tanto gubernamental como industrial, privilegia los beneficios económicos sobre el cuidado de los recursos naturales.
En América Latina a pesar de poseer el 46% del agua potable del mundo, sólo 14% de la que se emplea recibe tratamiento. Por ello, el incremento de afluentes con desperdicios, lo que afecta a los más pobres.
Enrique Beldarraín, del Comité Técnico del Tribunal Latinoamericano del Agua, apuntó: “podemos decir que en un 40% casi de la población de América Latina, recibe agua de mala calidad y la mortalidad infantil en niños menores de un año, es la primera causa de muerte la diarrea aguda, en América Latina”.
“Hemos visto cómo los ríos más importantes que pasan por estas ciudades se convierten en cloacas”, expuso Bogantes Díaz.
Las recomendaciones del tribunal permiten elevar las demandas a instancias internacionales.
“Podemos acudir nosotros con este fallo de repente a un tribunal jurisdiccional de carácter coercitivo, de repente con la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, a las cuales nosotros estamos deseosos de acudir si no se escuchan nuestras peticiones”, añadió Silvano Guerrero Quispe, del Comité Especial de Asuntos Comunales de Huancabelica, en Perú.
Y así, dotar de fuerza a organizaciones civiles, que trabajan por mejorar las condiciones de sus comunidades.
Por: Rafael H. Guadarrama
Fuente: Once Noticias
Sitio web: http://oncetv-ipn.net/noticias/index.php?modulo=despliegue&dt_fecha=2007-10-17&numnota=17