Académica poblana crea aparato para ahorrar agua en proceso de café

09 noviembre 2015

Foto: NTR

Indicó que las empresas cafetaleras utilizan, en promedio, entre cinco y ocho litros de agua para retirar el mucílago de la semilla de un kilo de café para su producción.

Esa agua, añadió, no puede ser reutilizada y es vertida a los ríos cercanos, lo que provoca que la fauna y la flora de la zona se contaminen por las altas concentraciones de cafeína.

Explicó que la función de dicha herramienta es retirar el mucílago del café, para facilitar el procesamiento del grano.

“La innovación consiste en que la limpia de la cereza del café, hasta llegar al grano, sólo usa un litro de agua para un kilo de café y sin causar daño físico, con lo que contribuye a reducir la contaminación de ríos en las regiones cafetaleras”, subrayó.

La experta de la BUAP agregó, según un comunicado, que la cantidad de mucílago que se genera es grande, no se puede eliminar manualmente.

Para ese fin creó un sistema mecánico que hace girar con una manivela y que se compone de dos rodillos de material polimérico, denominado comúnmente neopreno, resistente a la acidez del grano de café.

Espinosa Aquino explicó que al introducir el café, a través de los rodillos, que giran uno en sentido de las manecillas del reloj y otro en contra, se ejerce la presión necesaria para retirar con suavidad la cereza, hasta llegar al mucílago sin dañar el grano y dejar sólo el pergamino, que es la capa fina que lo cubre y puede ser retirada en una última etapa con el mínimo uso de agua.

La maestra en Ciencias Ambientales por la BUAP detalló que el desmucilaginador está hecho de fierro y cuenta con un tamaño de 32 centímetros de largo por 18 de alto, asimismo cada rodillo mide 12 centímetros de largo por seis de ancho.

Funcionan por medio de una palanca que se debe mover manualmente para retirar el pericarpio -pulpa exterior- y el mesocarpio –pulpa-, y de esa forma llegar al endocarpio –pergamino-.

Resaltó que debido a que los cilindros están hechos de neopreno se evita la adhesión de la pectina, que es una fibra natural que se encuentra en las paredes celulares de las plantas, lo que facilita el proceso de limpiado de la semilla.

Dicha herramienta,

Por su innovación tecnológica, comentó, se ha solicitado el registro de la patente ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI), en el área de agroalimentación, con el número MX/a/2012/008341.

Actualmente se trabaja en el laboratorio, donde cada kilo de café se procesa en 25 minutos, asimismo planean llevar el diseño a escala semi-industrial, para hacer nuevas pruebas y comparaciones de tiempo y cantidad del grano que se limpia en la etapa intermedia, hasta llegar al procesamiento final.


09 de noviembre de 2015
Fuente: NTR

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