BRASIL – Afectación de la Laguna de Carapicuiba por desechos tóxicos

19 agosto 2008

Tribunal Latinomaericano del Agua

Marzo de 2006

 

La laguna de Carapicuiba es un cuerpo receptor de las aguas residuales sanitarias provenientes de las comunidades vecinas. A esta drena las aguas de desperdicio de la Compañía de Saneamiento Básico del Gobierno del Estado de Sao Paulo, e inclusive, operó un botadero clandestino en sus márgenes que fue clausurado hace diez años.

Esta situación ha generado condiciones de estratificación térmica, en las cuales, las aguas en condiciones anóxicas por la excesiva carga orgánica se encuentran en los estratos inferiores de la laguna, mientras que las aguas oxigenadas han propiciado formas de vida en la superficie. Esta estratificación térmica es susceptible a cambios por la interacción de diversas variables físico-climáticas.

El río Tieté acarrea desechos tóxicos industriales y urbanos sin ningún tratamiento hacia el interior de la laguna de Carapicuiba. Como resultado, el Gobierno del Estado de Sao Paulo implementó en la década de los noventa un plan conocido como “Proyecto Tieté” que implicaba una serie de medidas orientadas a:

(1) Disponer de fondos internacionales para que las industrias normatizaran sus vertidos y no los descargaran en el río Tieté.
(2) Descontaminar el río Tieté, aumentar la profundidad del lecho del río para mitigar los efectos de las inundaciones en época lluviosa.

Este segundo aspecto, a juicio de los denunciantes, propició el uso de la laguna de Carapicuiba como receptor de los materiales inertes extraídos, donde se planteó la posibilidad de construir un parque público en Carapicuiba, con los materiales de desecho mediante el relleno parcial de la laguna.

Este relleno inició en el año 2002 y para mayo del 2003, se presentó un incidente de mortandad masiva de peces que alertó a la comunidad y despertó sospechas sobre la naturaleza de los materiales extraídos para la construcción del relleno. Se había establecido con anterioridad, que sólo los materiales inertes serían destinados para la construcción del relleno.

Análisis efectuados detectaron la presencia de metales pesados por encima de la norma en muestras de sedimentos recolectados en ciertos puntos del relleno de Carapicuiba. Posteriormente, la Comisión Externa de la Cámara Municipal de Carapicuiba, determinó que la laguna había sido contaminada.

A pesar de reconocerse los daños ambientales, el Tribunal Supremo Federal, autorizó la continuidad de disponer de los desechos en la laguna, argumentando razones de altos costos económicos asociados con la clasificación y disposición tecnificada de aquellos desechos no-inertes, en contravención a lo estipulado en la licencia ambiental.

Actividad denunciada: Alto riesgo sanitario y ambiental para la población ribereña y urbana de la región metropolitana de Carapicuiba por la grave contaminación de la Laguna de Carapicuiba por desechos tóxicos.

Veredicto:

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