Región Lagunera: agua para el campo
21 enero 2013Ante un almacenamiento mínimo tal es la alternativa que llevada a la práctica redundaría en nulos beneficios para productores campesinos laguneros como los de San Pedro de las Colonias y Francisco I. Madero, dependientes del agua rodada para lograr cosechas.
Cierto, la extracción de agua de toda presa tiene un límite a fin de no poner en riesgo su infraestructura, como es el caso de la de “El Palmito”. Por otra parte, cambiar el patrón de cultivos de la región implica minimizar jornales generados por la actividad agrícola establecida en perjuicio del campesinado de La Laguna de por sí vapuleado por una situación adversa no solamente en el agro comarcano, sino a nivel nacional.
¿Qué hacer entonces? ¿No hay agua suficiente? No. De tal modo es el gobierno Federal el que debe intervenir y apoyar con todos los medios a su alcance al sector social del campo. Si no hay agua, que haya subsidios o programas de trabajo suficientes y oportunos generadores de miles de jornales como los que están en riesgo de perderse en La Laguna, donde para irrigación agrícola, durante el año en curso, se dispone solamente de 450 millones de metros cúbicos de agua rodada.
Para asumir lo que debe hacer, al Gobierno Federal lo que le sobra es dinero. De otra manera no se explican sus asignaciones de cientos de miles de pesos a los partidos políticos o bien, los sueldos estratosféricos asignados a diputados locales, federales y senadores, ministros y funcionarios de primer nivel. Emolumentos, todos, insultantes.
Agua para trabajar es lo único que piden campesinos ciertos de que la tierra jamás se ha quedado con el trabajo de nadie. Si no la hay, respaldo, apoyo real, es el que está obligado a ofrecer el Gobierno Federal para no darle la espalda a productores ejidales que también son mexicanos.
21 de enero de 20013
Fuente: La Laguna
Nota de José María Mena Rentería.
