Tercera Declaración en el proceso “Hacia Otra Visión del Agua”
15 junio 2007Principios de nuestra Visión del Agua
PRIMER PRINCIPIO DE NUESTRA VISIÓN DEL AGUA: EL AGUA ES SAGRADA
El agua es y ha sido siemrpe un bien sagrado en la historia y la cultura de los pueblos y de la humanidad entera: permite la existencia de la vida en la tierra en todas sus manifestaciones.
El agua es una materia inefable, indispensable para la vida de todos los seres vivos: para las plantas y los animales, para sus ecosistemas, para los bosques, las selvas, las praderas, la tundra y las estepas; para los humedales, el “desierto” y los océanos; y desde luego, para todos los seres humanos, los pueblos, las naciones y las sociedades todas.
El agua no puede ser reducida, como lo ha hecho el actual pensamiento economicista (la noción del desarrollismo económico vigente), a un simple “recurso natural” o a un “bien económico”, a una mera mercancía más, y con ello propiciar su aún más rápida degradación a un agua sucia y envenenada, en agua para la muerte y ya no para la vida.
El agua, desde una Nueva Visión reivindicadora como la nuestra, debe conservar un carácter sagrado, un renovado reconocimiento social que la SACRALICE, en el sentido de que la preserve, la excluya y la proteja del sólo ciego mercado materialista, del intercambio económico, de la supuesta libre empresa, de una absurda libertad contractual; debe generar una nueva actitud que evite que sea reducida a una mera mercancía más, y degradada por los peores intereses en acuerdos de un dudoso libre comercio. Una nueva visión que la considere en un plan superior a lo estrictamente material, a lo sólo económico o sólo social e incluso a lo legal para considerarla en un sentido ético y cultural íntegro. Como dice la distinguida luchadora ecologista hindú Vandana Shiva: “El valor del agua es ecológico, cultural y espiritual”
En esos tres planos reside el valor sagrado del agua, muy por encima de las reducidas y miopes concepciones de la pura economía, o peor, del sucio y vil mercantilismo contemporáneo..
Esta Nueva Visión nuestra se desprende del primer principio de la Red Ecologista Autónoma de las Cuenca de México que dice así:
SACRALIDAD: Los ríos, los mares, los lagos, los bosques, y sus animales silvestres, el suelo fértil y el aire limpio no tienen precio: son sagrados, y su valor y trascendencia, más allá de la especie humana: son inconmensurables e inalienables.
Para la Red Ecologista Autónoma de la Cuenca de México EL AGUA ES SAGRADA, y uno de los propósitos centrales de la Red es infundir en la sociedad mexicana el pleno reconocimiento de éste carácter sagrado del agua, y con ello lograr un radical cambio de actitud y de nuestras conductas respecto de ella.
SEGUNDO PRINCIPIO DE NUESTRA NUEVA VISIÓN DEL AGUA: EL AGUA TIENE UN LUGAR ECOLÓGICO.
Todos los sitios, lugares o parajes de la Tierra tienen una matriz Aire-Agua-Suelo, producto de ajustes y acomodos naturales sucedidos a lo largo de miles o millones de años: tienen una cantidad de agua determinada por muy antiguos equilibrios naturales, los que a se vez permiten la existencia de los complejos equilibrios locales entre las plantas y los animales: son el fundamento de la biodiversidad existente en cada sitio, lugar o microcuenca.
La alteración radical de la matriz local del agua, por medio de grandes obras de ingeniería hidráulica (superbombas y supertubos), provoca la ruptura y empobrecimiento del equilibrio ecológico y la biodiversidad del sitio, paraje o microcuenca. Si existe una natural abundancia de agua en cierto sitio, es gracias a muy antiguos procesos naturales, pero, extraer agua de este sitio mas allá de cierta escala o nivel, puede traer muy graves daños al equilibrio ecológico del sitio o lugar y de la región. El agua tiene un lugar ecológico y por lo mismo, existe una escala o límite máximo para su extracción en cualquier lugar de la Tierra.
