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Certifica Ramsar humedales colimenses

13 marzo 2009

Fuente: Ecos de la Costa
13 de marzo de 2009
Por Édgar H. Badillo Medina 

Los humedales de la zona de Boca de Apiza, El Chupadero y Tecuanillo, fueron certificados como humedales de importancia mundial. La certificación corrió a cargo de la Convención Ramsar con sede en Suiza. Asimismo, ya se inició el trámite para que los vasos tres y cuatro de la laguna de Cuyutlán también sean certificados.

La certificación correspondiente la recibió la secretaria general de Gobierno, Yolanda Verduzco Guzmán, quien encabezó el evento en donde el comisionado nacional de Áreas Nacionales Protegidas (CONANP), Ernesto Enkerlin Höeflich, entregó dicho documento.

El documento entregado por el funcionario dependiente de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales acredita a los destinos de Boca de Apiza, El Chupadero y Tecuanillo como humedales con importancia internacional por diversas consideraciones.

Entre los principales aspectos que se valoraron se encuentran aquellos en donde se determina que a esta zona arriban para el desove tres especies de tortuga marina, además de que este espacio proporciona hábitat para una gran cantidad de especies de aves y la playa está entre las cuatro más importantes para la anidación de tortuga golfina y laúd en el Pacífico Mexicano.

En el evento, Ernesto Enkerlin Hoeflich, titular de la CONANP, dio a conocer que será para junio próximo cuando el presidente de la República, Felipe Calderón Hinojosa, emita el decreto como área protegida al Santuario Playa Boca de Apiza-Chupadero-Tecuanillo.

Ernesto Enkerlin destacó que lo importante de la certificación es lo que se haga con esta área, por lo que exhortó a los colimenses a propiciar las mejores condiciones para que este sitio se conserve para siempre.

De la misma manera, el comisionado nacional recibió de parte del secretario de Desarrollo Urbano, Eduardo Gutiérrez Navarrete, el expediente de la laguna de Cuyutlán para que los vasos tres y cuatro sean considerados para la certificación Ramsar.

Gutiérrez Navarrete sostuvo que estos espacios también deben de obtener la certificación porque sustentan especies vulnerables en peligro y comunidades ecológicas amenazadas; sustenta poblaciones de especies vegetales y animales importantes para mantener la diversidad biológica de la región; cuenta con una población mayor a 20 mil aves acuáticas y migratorias, y es una fuente de alimentación importante para peces, en la zona desovan tortugas.

El Convenio Ramsar ha logrado involucrar a más de 150 países, cubriendo con ello 150 millones de hectáreas, de las cuales México aporta 8 millones.