Una de las plantas de tratamiento de agua residuales más grandes del mundo estará en funcionamiento a finales de 2011 en Atotonilco, Hidalgo, y permitirá limpiar alrededor de 60 por ciento de las aguas negras de la Ciudad de México.

La primera etapa, que tendrá un proceso de tratamiento químico de las aguas, entrará en funcionamiento en noviembre de 2011 y se espera que la segunda fase de la planta trabaje en el primer semestre de 2012.

Cuando la planta funcione a su máxima capacidad podrá tratar hasta 40 metros cúbicos por segundo, 2.5 veces el agua que ingresa por el Sistema Lerma Cutzamala al Distrito Federal.

Juan Elvira Quesada, secretario de Medio Ambiente Recursos Naturales y Pesca, destacó que la planta permitirá sanear hasta 14 por ciento de las aguas residuales que se generan en el país.

“Si hoy se pusiera en funcionamiento esta planta subiríamos de 40 al 54 por ciento (de las aguas residuales tratadas en el país)”, añadió el funcionario.

El terreno donde se edificará tiene 158 hectáreas. Sus aguas, una vez limpias, servirán para surtir a tres distritos de riego de Hidalgo.

Además, permitirá reinyectar agua a los acuíferos y captación de biogás, y generará hasta siete mil empleos directos e indirectos.

Se trata, dijo el titular de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), José Luis Luege, de una deuda histórica con el Estado de Hidalgo, que ha recibido durante décadas los desechos de la Zona Metropolitana de la Ciudad de México, afectando zonas de riego de temporal y contaminando ríos.

“Hay que preguntar a las personas que habitan en esos municipios, que son usuarios del riego, que manejan aguas negras, los olores (que padecen), los focos de infección, los problemas de salud de niños y adultos, es una deuda histórica, es inexplicable cómo llegamos a este nivel”, añadió.

El costo estimado de la macroplanta en el presupuesto de la Conagua era de ocho mil millones de pesos, sin embargo, tras el aumento del tipo de cambio del dólar, se espera que aumente entre 20 y 30%.

Se estima que el costo por limpiar cada metro cúbico de agua sea de 2.46 pesos, aunque se requerirá de otras cuatro plantas para sanear la totalidad del agua que genera la ciudad, algo que puede ser posible en los próximos años.

En las bases de la licitación de la planta de tratamiento, que se publicaron ayer, se establece que 49 por ciento de la inversión será gubernamental y el resto provendrá de la iniciativa privada. La concesión para la operación y aprovechamiento de la planta será por 22 años.

Actualmente, la zona metropolitana del Valle de México tiene el menor índice de tratamiento de aguas residuales, lo que a decir de la Conagua, genera “contaminación y un grave desbalance hídrico”.