• Home
• Nacionales
• Nacionales
• México y su reforma del agua: entrevista con Aziza Akhmouch, directora del programa para la gobernanza del agua de la OCDE

México y su reforma del agua: entrevista con Aziza Akhmouch, directora del programa para la gobernanza del agua de la OCDE

22 diciembre 2014

 

Es autora de varios informes de la OCDE que brindan recomendaciones a los gobiernos en apoyo a mejorar la gobernanza en el sector del agua. También creó y coordina la Iniciativa de Gobernanza del Agua de la OCDE, una red de 100 delegados de los sectores público, privado y sin fines de lucro, que se reúnen en la OCDE dos veces al año a través deun Foro de Política.

AzizaAkhmouch dedicó su doctorado a la geopolítica de los conflictos por la gestión privada del agua en Argentina, y también tiene una Maestría en Negocios Internacionales por la Universidad de Paris-Dauphine.

Azizanos concedió una entrevista a Alianza por el Agua…

AxA: A partir del Lanzamiento del Reporte de la OCDE "Hacer Posible la Reforma del Agua en México" en el año 2013. ¿Qué percepción se ha observado un nivel internacional con respecto a México y su gestión del agua?

Aziza: “México fue el primer país en comprometerse con la OCDE en un diálogo de política sobre el agua. Éste consistió en un proceso de un año a través de misiones en campo, un seminario sobre políticas con más de 70 actores de alto nivel de los sectores público, privado y no gubernamental, así como la contribución de cuatro revisores de Australia, Brasil, Italia y el Reino Unido. El informe final "Hacer Posible la Reforma del Agua en México" proporcionó una evaluación basada en evidencia y las recomendaciones de política a las medidas de apoyo en torno a la reforma del agua en el país. Fue entregado el 8 de enero de 2013, por Ángel Gurría, Secretario General de la OCDE a Juan José Guerra Abud, Secretario de Medio Ambiente, y a David Korenfeld, Director General de la Comisión Nacional del Agua.

Con este diálogo sobre políticas, México probósu determinación y visión de futuro "abriendo sus libros" a la OCDE, y mostrandola apertura para aprender experiencias de otros países, así comoasumir las recomendaciones de la OCDE con el fin de desarrollar mejores políticas de agua. Mediante el intercambio de experiencias y de aprendizaje entre iguales para la reforma del agua que está en curso, México ha demostrado un compromiso ejemplar y dedicación para fortalecer la gobernanza del agua, en cooperación con la OCDE. México también preparó el camino para que otros países lleven a cabo ejercicios similares, dado que posteriormente, los Países Bajos y Brasil pidieron a la OCDE participar en estos diálogos de política sobre la gobernabilidad del agua.

El informe provee recomendaciones fundamentales, pertinentes para la revisión del marco jurídico de México, incluyendo el desarrollo de una nueva Ley General de Aguas, y la elaboración del Programa Nacional Hídrico 2013-2018 en lo que refiere a la seguridad hídrica y el acceso a los servicios de agua en el país. La publicación de la OCDE "Hacer Posible la Reforma del Agua en México” fue utilizada como un instrumento estratégico para el gobierno a fin de desarrollar el Programa Nacional Hídrico, y la incorporación del derecho humano al agua y al saneamiento en el marco legal que está en curso. También se prevén importantes reformas de los servicios de agua y saneamiento para resolver problemas de ineficiencia a través de una reasignación de competencias normativas entre los gobiernos federal y estatales, y la creación de capacidades a nivel municipal”.

AxA: Nuestro país se encuentra en una coyuntura muy interesante por la formulación de una posible nueva Ley General de Aguas que ya mencionabas. Tú que estuviste coordinando el desarrollo de este reporte, ya partir de todos los hallazgos de la OCDE, ¿cuáles consideras que son los componentes imprescindibles y no negociables, que deben considerarse en esta ley?

Aziza: “El informe de la OCDE señaló una serie de desafíos críticos que enfrenta México y que exigen una reforma en el sector. México padece de estrés hídrico y algunas cuencas lo experimentan de manera más aguda que otras. En los últimos años, la cantidad de agua disponible para cada persona ha disminuido drásticamente debido al crecimiento demográfico. Por otra parte, el agua se distribuye de forma irregular en México, con más de tres cuartas partes de la población que vive en regiones con poca disponibilidad de agua. Mejorar la calidad de los ríos, lagos y acuíferos es otro gran reto importante para México. La calidad de las aguas superficiales y subterráneas se ve amenazada por las cargas de contaminación de fuentes localizadas y difusas, y una atención insuficiente de las descargas de aguas residuales.

Actualmente, el 91.3% de la población tiene acceso a servicios de agua potable y el 89.9% tiene cobertura de saneamiento. Por otra parte, la vulnerabilidad a inundaciones, sequías y eventos hídricos extremos es alta. Entre 1980 y 2007, las inundaciones, los huracanes y las sequías afectaron a más de 8 millones de personas y causaron MXN 130 mil millones en daños y perjuicios. Sólo en 2010, los huracanes afectaron 118 municipios de Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas; 138 municipios de los estados de Campeche, Puebla, Veracruz; y 56 en los estados de Chiapas y Oaxaca. Las proyecciones futuras de las tendencias meteorológicas estiman que habrá inundaciones en 17 estados, en los que viven más de 60% de la población. Por último, pero no menos importante, durante los próximos 20 años, México tendrá que proporcionar adicionalmente servicios a 36 millones de habitantes en agua potable y 40 millones en saneamiento. Para ello, los estados con mayores desafíos son Baja California, Chiapas, México, Jalisco, Puebla y Veracruz.

Para hacer frente a estos desafíos, México tiene un marco normativo existente y bien desarrollado para la gestión de recursos hídricos. Varias instituciones y competentes a nivel federal y estatal, y México utilizanuna variedad de instrumentos económicos, a partir de los ingresos por los mercados del agua. Sin embargo, el aumento significativo de la inversión pública en el sector no ha resuelto todos los desafíos. Por ejemplo, la aplicación de políticas sigue siendo desigual y el sector carece de mecanismos de coordinación para mitigar la fragmentación territorial e institucional. Los consejos de cuenca no son plenamente operativos a veinte años de su creación. El marco regulador de agua potable y saneamiento se dispersa a través de múltiples actores, y los subsidios perjudiciales en otros sectores (energía, agricultura) funcionan claramente en contra de los objetivos de política del agua.

Atender la reforma del agua en México requiere una acción en varios frentes y el informe de la OCDE sugiere una serie de palancas que se pueden considerar para configurar un marco de política de aguas coherente y rentable en México. Algunas de estas palancas son "imprescindibles" para México para mejorar la gobernanza del agua.

• En primer lugar, la reforma del agua en México debe fomentar la coherencia política con otros sectores clave como la agricultura, la energía y el desarrollo territorial.

• En segundo lugar, sería fundamental establecer mecanismos de seguimiento e incentivos para la mejora de resultados de las políticas del agua a nivel sub-nacional que sea flexible y adaptable a las especificidades del Estado y de las cuencas. Esto también requeriría la creación de capacidades en todos los niveles de gobierno.

• En tercer lugar, la reforma del agua en México debe asegurarse de aprovechar plenamente los beneficios de los instrumentos económicos existentes para apoyar la financiación eficaz de la gestión de los recursos hídricos como los principios de quien contamina paga, el que se beneficia paga, la equidad y la coherencia de las políticas.

• En cuarto lugar, el marco regulador de los servicios de agua debe aclararse para asignar puntualmente las responsabilidades de cada nivel de gobierno, fortalecer la aplicación y el cumplimiento, y aumentar el enfoque en la calidad y eficiencia de la prestación de servicios.

• Por último, el papel, las prerrogativas y la autonomía de los consejos de cuenca se deben fortalecer para que puedan diseñar políticas a la medida de su contexto, de acuerdo a los retos específicos y capacidades distintivas, desarrollar planes de cuenca reales, identificar y priorizar proyectos y generar los recursos necesarios para llevar a cabo sus funciones.

El informe de la OCDE concluyó con un plan de ejecución provisional de la reforma del agua en México, que sugiere medidas prácticas, indicadores de seguimiento y evaluación, así como las experiencias pertinentes de otros países de la OCDE. En la medida en que México esté considerando una reforma del sector del agua, este plan de implementación puede ser una herramienta valiosa para ayudar al gobierno a hacer que suceda”.

AxA: La OCDE ha tenido más experiencias de colaboraciones para el desarrollo de estos diagnósticos del agua en otros países de América Latina, como Brasil por ejemplo. ¿Cuáles consideras que son los elementos rescatables y que pueden replicarse desde México a otros países, a partir de nuestro modelo?

Aziza: “En la OCDE, creemos que la gobernabilidad está basada en el lugar y el contexto del que se depende, y tiene que adaptarse de acuerdo a especificaciones y limitaciones locales. Por lo tanto no hay un plan mágicoo de talla única que todos puedan replicar de un país a otro, pero el intercambio de buenas prácticas de gobernanza del agua y aprender de la experiencia de otros países despierta el interés en otros para mejorar sus marcos de gobernanza del agua. En ese sentido, México ha avanzado en varios aspectos de la gobernanza hídrica y muestra algunas buenas experiencias y casos de éxito que podrían replicarse en otros países.

Por ejemplo, el Consejo Técnico de la Comisión Nacional del Agua puede ayudar a resolver algunos aspectos de la fragmentación institucional de en la política del agua a nivel federal como órgano intersecretarial. Es responsable de la aprobación y evaluación de los programas de la Comisión, sus proyectos, presupuesto y operaciones. Además, contribuye a una mayor coherencia política mediante la coordinación de las políticas del agua y la definición de estrategias comunes entre varios ministerios y organismos (SEMARNAT, SEDESOL, SAGARPA, SENER, CONAFOR, IMTA, etc.).

Además, México ha promovido la participación pública en el sector del agua; esta es una experiencia muy relevante para los países de la OCDE. El acuífero Santo Domingo (Baja California Sur) es un buen ejemplo de éxito de múltiples partes interesadas en la coordinación para la gestión de los recursos hídricos. Juntos, la oficina local de la Conagua en Baja California Sur, el Gobierno del Estado, la asociación de usuarios agrícolas y ganaderos del Distrito de Riego del Valle de Santo Domingo, la delegación local de la SAGARPA y los COTAS han ideado medidas para superar el deterioro de la calidad del agua y la sobreexplotación de las aguas subterráneas a través de la modernización de técnicas de riego y el fomento de la capacidad de los agricultores. Del mismo modo, la Comisión de la Cuenca del Río de la Laguna de Tecocomulco está conformado por representantes de los diferentes niveles de gobierno (federal, estatal, municipal), los usuarios del agua y de las organizaciones de la sociedad civil, y fomenta diálogos constructivos entre los sectores que habían sido históricamente antagónicos. Las reuniones regulares y dinámicas, así como los acuerdos de monitoreo, han posicionado a la Comisión como una instancia de participación social de confianza. Se toma como referencia mediante la consulta del gobierno regional para la implementación de sus programas de desarrollo a nivel de cuenca. La experiencia de la Laguna Tecocomulco será presentada como un caso de éxito en un próximo informe de la OCDE "Involucramiento de los Actores Clave para una Gobernanza del Agua Incluyente" que se publicará en el VII Foro Mundial del Agua en abril de 2015, en Corea.

Como último ejemplo, la Comisión Nacional del Agua ha estado liderando esfuerzos prometedores para mitigar los impactos de los riesgos hidrometeorológicos en México, tales como inundaciones y ciclones tropicales, que pueden acercar lecciones a otros países que enfrentan retos similares en relación con las futuras incertidumbres climáticas. CONAGUA y el Centro Nacional de Prevención de Desastres (CENAPRED) han colaborado en el desarrollo de sistemas de alerta de inundaciones para proteger las zonas más densamente pobladas. El Fondo para la Prevención de los Desastres Naturales (FOPREDEN) ha sido fundamental en este proceso mediante la financiación de proyectos en los ámbitos estatal y municipal. La recopilación y coordinación de la información han mejorado mucho con reportes consensuados para ciclones tropicales elaborados de manera conjunta por las diversas organizaciones meteorológicas. El establecimiento de FOPREDEN también demuestra el compromiso del gobierno federal para un enfoque integral de gestión de riesgos, y la priorización de las inversiones en materia de prevención y mitigación, y se basa en una amplia consulta y coordinación de políticas entre las agencias federales clave, incluyendo la CONAGUA, SEDESOL, SEGOB, CFE, SEMARNAT, los estados y los municipios para priorizar y canalizar fondos de manera consecuente”.

AxA: ¿Qué sigue para la OCDE en cuanto a su agenda de agua para México y Latinoamérica en los próximos años?

Aziza: “Mirando hacia el futuro, la OCDE se ha comprometido a continuar con su fructífera cooperación con México. Actualmente estamos desarrollando Principios para la Gobernanza del Agua a ser adoptados por los países miembros de la OCDE en 2015. Vamos a organizar amplias consultas regionales en los diferentes continentes para idear un conjunto de herramientas para estos principios, que incluye guías acordes con las particularidades regionales. Esperamos contar con el apoyo de México para liderar el trabajo de la OCDE sobre la gobernanza del agua y que nos ayude en este proceso hacia América Latina.

Por último, estamos coordinando el tema de la Gobernanza en el VII Foro Mundial del Agua (12 a 17 abril 2015, Corea) y haremos todo lo posible para crear sinergias con el proceso regional de las Américas para ofertar oportunidades para mostrar la experiencia de México. Para ello, la OCDE participará en la Semana del Agua de América Latina y El Caribe del 23 al 27 Marzo 2015 en Chile”.

---

19 de diciembre de 2014
Fuente:  Alianza por el Agua