“Cuando falta agua la buscamos abajo y nunca arriba y pasamos por alto que el agua de lluvia es un recurso que puede resolver muchos problemas” Ese fue el mensaje reflexivo con el que inició el Seminario de Centroamérica y República Dominicana sobre sistemas de captación y aprovechamiento del agua de lluvia que se realiza en Ciudad Panamá en el que participan más de 60 funcionarios públicos del sector agrícola y de salud, organizaciones de productores, académicos y estudiantes, y organizaciones comunales de los países miembros del SICA.

Muchas veces nos preguntamos qué podemos hacer por nuestros ríos. La avalancha de solicitudes de obras de presas o dragados, el inacabado asunto de los vertidos o la importantísima cuestión de la expansión de un regadío sin criterio económico alguno nos lleva a actuar de apafuegos e ir a salto de mata día tras día. Todo esto es necesario, pero a todas luces insuficiente.

Las energías renovables demuestran cada vez más su importancia en las pretensiones de mantener libre de agentes contaminantes al planeta y mitigar los efectos negativos del consumo energético en continuo aumento, inducido por el crecimiento social y económico de las comunidades.

Los análisis para evaluar la ecotoxicidad de efluentes, los cursos de agua contaminados y con presencia de sustancias químicas, se realizan según métodos normalizados que emplean algas unicelulares, microcrustáceos, peces y bacterias.

El Ministerio del Ambiente de Ecuador, a través del Programa de Reparación Ambiental y Social (PRAS), la Subsecretaría de Calidad Ambiental (SCA) y la Dirección Provincial del Ambiente de Sucumbíos (DPAS), verificó nuevamente los daños causados en las riberas del río San Miguel por un derrame de petróleo ocurrido en Colombia hace dos semanas.