Los pobladores decidieron tomar las instalaciones del Palacio Municipal para exigir la presencia del alcalde Honorio Silvestre Antonio, quien los dejó plantados en la reunión donde tratarían el problema de la escasez del agua potable y la contaminación que sufren galerías filtrantes por deficiencias en la red de drenaje .

Fue 10 horas después cuando el alcalde arribó al Palacio Municipal, lugar donde desde el inicio de la manifestación se retuvo a su esposa, quien incluso llegó a decir que los manifestantes la hicieron “prisionera”.

Antes de que el alcalde llegara ya se tenía conformada la comisión que dialogaría con las autoridades, a quienes expresaron la urgencia de detener la contaminación que generan las deficiencias en la red de drenaje, lo que ocasiona que los desechos corran a cielo abierto en algunas zonas de ese municipio.

Lo que parecía ser un asunto fácil de solucionar resultó ser más complicado, y fueron casi cinco horas de diálogo las que se necesitaron para poder establecer acuerdos, mismos que se signaron a los 30 minutos de ayer.

Tras la firma del convenio, la comisión notificó a sus compañeros que mantuvieron la toma del Palacio de modo que 15 horas después del inicio de la movilización se liberó el edificio municipal.

Francisco López Vázquez, integrante de la comisión de ciudadanos, dio a conocer que entre los acuerdos que se firmaron está el compromiso del ayuntamiento para instalar una planta de tratamiento de aguas residuales, con lo que se espera resolver el problema de contaminación.

El otro punto es que se buscará habilitar un segundo pozo de agua con la finalidad de que toda la población cuente con el servicio de agua potable, aunque no se definió en donde podría perforarse, aclaró.