Ramírez de la Parra agrega que el fenómeno 'El Niño' se alargará en 2016, por lo que generará mucho movimiento en el Pacífico. TWITTER / @RobRmzdelaParra

 

“Ahorita tenemos para abastecer a la población en todo el territorio nacional para el año 2016 y también el 2017, aún cuando en el 2016 no cayera una sola gota de agua”, afirmó al explicar que existe desde el 2013 una política de almacenamiento del agua.

Precisó que hay agua almacenada para abastecer a la población para los próximos dos años, así como para la suficiencia alimentaria en la siembra en el campo para los próximos dos ciclos agrícolas, es decir de octubre de 2015 a septiembre de 2017.

Señaló que en los últimos tres años hubo periodos de lluvias muy buenas en el país, pero eso no significa que las personas deben de consumir demás, ya que la nueva política federal sobre el abastecimiento del agua prevé que se tiene que almacenar suficientemente cantidad de este recurso para que el país pueda tener un abastecimiento de por los menos dos años a la población, aún si no cayera una sola gota de lluvia.

“No estamos exentos, derivado del cambio climático, en que tengamos una sequía que se pueda convertir en una sequía muy intensa (…) Tenemos que estar preparados”, dijo.

Agregó que “nos estamos preparando para una posible sequía. Hay partes de nuestro territorio nacional que hoy ya están en un tema de sequía extrema como Baja California en su parte norte”.

Explicó que actualmente el 100 por ciento del agua que abastece a las ciudades de Mexicali, Tijuana, Rosarito y Tecate proviene de Estados Unidos a través del Tratado sobre Distribución de Aguas Internacionales entre ambas naciones. Ese recurso viene del río Colorado y también del río Bravo.

Como medida para resolver la posible escasez de agua de ambos lados de la frontera por la sequía que sufre California, el gobierno federal inició la construcción de una desalinadora en Ensenada y está a punto de lanzar los trabajos para hacer otra en Rosarito. También la Conagua planea una desalinadora en Los Cabos.

Por otro lado, el director general de la Conagua reconoció haber iniciado su mandato en una situación difícil causada por la salida David Korenfeld, quien tuvo que renunciar en abril pasado por haber usado con fines personales el helicóptero oficial de la dependencia.

“Me tuve que sentar en una silla en un momento en el que uno no sabía hacia donde tenía que dirigirse porque no lo tenía en la mente”, expresó al recordar que su mandato también coincidió con el inicio de la temporada de huracanes.

No obstante, comentó que este año se ha logrado por primera vez crear consciencia dentro de la población ante los impactos de los huracanes gracias a una sinergia, nunca visto antes, entre las autoridades y los medios de comunicación.

"Logramos hacer una consciencia en la población y hacer entender a la población que un huracán es igual que un sismo y hay que saber que hacer", dijo.

Comentó que queda como pendiente la aprobación de la reforma de la Ley General de Aguas, cuya discusión se encuentra parada en la Cámara de Diputados desde marzo pasado.

Agregó que el fenómeno meteorológico El Niño se alargará en 2016 por lo que continuará generando mucho movimiento en el Océano Pacífico, pero advirtió que la próxima temporada de ciclones en el Atlántico podría ser más activa también debido a que actualmente el Mar Caribe es más caliente, lo que generará mayor humedad y más actividad meteorológica en la zona.

10 de diciembre de 2015

Fuente: El Informador

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