Desperdicio de agua en la Ciudad de México

28 marzo 2018 Agua

Muchas personas carecen de acceso al agua potable  para cubrir sus necesidades básicas.

La distribución heterogénea de las lluvias y el cambio climático, aunados  a la forma ineficiente en la que se aprovecha causando desperdicio, contaminación y sobreexplotación de los cuerpos de agua, han reducido su disponibilidad, principalmente en zonas urbanas.

A nivel mundial,  se estima que se vierten al medio natural sin ningún tratamiento previo el 80% de las aguas residuales que se generan, lo cual tiene repercusiones graves en el medio ambiente y en la salud de las personas.

México  genera anualmente 443 mil 937 litros de aguas residuales por segundo provenientes de descargas municipales e industriales, de las cuales sólo se trata el 56.9%. El volumen restante que se vierte directamente al entorno o se utiliza para riego agrícola, genera deterioro ambiental e incrementa la incidencia de enfermedades principalmente gastrointestinales, por el consumo directo de agua o productos agrícolas contaminados.

En la Zona Metropolitana del Valle de México (ZMVM) la mayor parte del agua que utilizamos  —75%— proviene del subsuelo. El acuífero que la abastece, está sobreexplotado; se recarga a una tasa de 9,900 litros de agua por segundo, mientras  pierde por extracción 15,900 litros, en la misma unidad de tiempo. Presenta un déficit de 6,000 litros por segundo. Esto genera escasez y produce hundimientos en diferentes partes de la ciudad.

El volumen restante, salvo una pequeña proporción que se toma de cuerpos de agua superficial, proviene de otras cuencas; es suministrado a la ciudad a través de los sistemas Lerma y Cutzamala en donde el agua recorre 150 km y tiene que ser bombeada 1,100 metros hacia arriba, antes de bajar por gravedad al Valle de México.

Tener agua en la ciudad de México implica altos costos monetarios, sociales y ambientales, sin embargo se pierde en fugas el 40% del agua que se canaliza a través de los sistemas de abasto y drenaje.

Paradójicamente, el 33.7% de toda la lluvia que cae en la Ciudad de México, va directamente al drenaje. Si fuera posible recuperar todo este volumen, de agua parcialmente limpia —menor carga de contaminantes que las aguas residuales— sería posible cubrir las necesidades mínimas diarias de 220 mil 320 personas. Si bien se requeriría llevar a cabo algunas prácticas para asegurar su calidad para el consumo, podría ser utilizada directamente en los sanitarios u otras actividades como limpieza o riego y permitiría reducir el consumo de agua potable, en estos usos.

Finalmente, es importante señalar que el 91.54 % de las aguas residuales que se producen en la ZMVM, no se trata lo cual impide aprovecharlas nuevamente, genera contaminación y problemas de salud.

Si con una nueva visión, se incorporan a la política de manejo de agua en la ciudad de México acciones para: el aprovechamiento del agua de lluvia, el reuso del agua tratada y la reparación de la infraestructura para evitar las fugas.

Podríamos acabar con buena parte del desperdicio, reducir la presión sobre el acuífero, prevenir la contaminación y disminuir los costos para abastecer la cuenca de México.

Para lograr esto, es necesaria una fuerte inversión pero los beneficios de diversificar las fuentes de agua a nivel local, son múltiples.

Reparar las fugas, captar el agua de lluvia y adoptar prácticas para el uso responsable como colectar el agua de la regadera mientras alcanza la temperatura correcta, lavar el auto con una cubeta,  cerrar la llave al enjabonar los trastes, son acciones que puedes implementar desde tu hogar, pero debes saber que nuestros patrones de consumo de bienes y servicios  son también  determinantes para evitar el desperdicio de este líquido vital.

Visita la sección  Consumo de agua, en el siguiente enlace.

https://agua.org.mx/sustentabilidad/#consumo-de-agua

 

Monroy, O. (2017) Manejo sustentable de recursos para la Ciudad de México desde una visión de cuenca. Ponencia presentada en el marco del Foro de Trabajo: Consensos para la construcción de la nueva ley de aguas y la Contraloría Ciudadana para la Ciudad de México,  Casa de la Paz. Universidad Autónoma Metropolitana

Conagua, (2016) Situación del subsector agua potable, saneamiento y alcantarillado En: https://www.gob.mx/cms/uploads/attachment/file/184667/DSAPAS_2016_web_Parte1.pdf

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¡Adiós 2024! El año se acaba así que es un buen momento para hacer un recuento de lo que ocurrió en el año en temas de agua y medio ambiente. ¿Qué acuerdos se firmaron? ¿Qué nos espera el próximo año?

¡Pon a prueba tus conocimientos en este tema! ¡Y diviértete!

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