Agua en disyuntiva por 300 mil millones de pesos.

14 enero 2015

Se plantean modificaciones a la legislación, que permita la construcción de nuevas plantas para tratar agua, por parte de autoridades municipales, estatales y gubernamentales.

Proceso que se debería llevar a la realidad dentro del primer semestre del año, para que verdaderamente revierta el gran rezago que hay en tratamiento de agua.

Al día de hoy, sólo se trata 20% del agua que se descarga en ríos, lagunas y presas. El otro 80% del agua que se descarga se obtiene tal como sale de las ciudades, lo que implica contaminación al campo y agua de mala calidad.

Y es que, si bien es cierto, la lluvia siempre reconstituye las lagunas, ríos y presas, hoy día, cuando las ciudades toman el agua tratada, sólo 40% es lo que se aprovecha, el otro se desperdicia en fugas y mal manejo.

El objetivo sería que se tratara 60% del agua, y se pudieran establecer mecanismos que permitieran aprovechar el agua de lluvia, no sólo para el uso del sector empresarial sino gubernamental e incluso en el sistema de vivienda.

Aunque en el caso de la vivienda, la participación de la sociedad sería indispensable. A través de esquemas que permitieran en ahorro del agua y la recopilación del agua. Esquema que podría ser más tardado, pero no imposible, aunque la vivienda nueva sería la que tendría que poner el ejemplo, pues sería más fácil que desde el nacimiento de una vivienda se edificaran las condiciones para recolección de agua de lluvia.

No obstante, en dicho programa del agua, es fundamental la intervención del gobierno federal, estatal y municipal, dado que la inyección de capital es superior a 300 mil millones de pesos en nuevas plantas de tratamiento de agua, y no puede ser tarea de unos cuantos.

De ahí que el programa es viable si todos los gobiernos estatales, municipales, federales e iniciativa privada toman el agua como un tema vital.

Los beneficios no sólo se traducirían en evitar que el agua se desperdicie sino que haya precios más reales y el agua no contamine las áreas agrícolas y se puedan obtener mejores productos.

Lo cierto es que la moneda ya está en el aire en pro de que ello se lleve a la realidad.

Será posible que el tema sea por demás importante, como para hacer eco en un año electoral, y ser llevado a la realidad.

En fin, esperemos a ver cómo se mueven las fichas en materia ambiental, donde se pone mucho énfasis, y ello podría impulsar el desarrollo e inversión en plantas residuales y esquemas que permitan un mejor suministro del líquido vital, no sólo para el sector empresarial y gubernamental sino para los ciudadanos.

Así que seguiremos de cerca el tema, en pro de que pueda darse un avance en él, más cuando se comienzan a mover las fichas a favor de erogar el dinero que se tenía para el sector de infraestructura.

04 de enero de 2015
Fuente: Excélsior
Nota de Marielena Vega