• Contenidos

Resultados para:

Comunicado de Prensa: El río Uruguay está de luto

 

La pastera empezó a funcionar y ya se huele a repollo podrido o a “coliflor hervido” según la culinaria descripción de la empresa. La Asamblea Regional Argentina – Uruguay emitió un comunicado declarando el 9 de noviembre, cuando la planta de Fray Bentos se puso en marcha, como “Día de duelo regional”.

La pastera empezó a funcionar y ya se huele a repollo podrido o a “coliflor hervido” según la culinaria descripción de la empresa. En Gualeguaychú dijeron a lavaca: “No perdemos la fe en echarlos”. La Asamblea Argentina-Uruguay declaró en Colonia Agraciada día de duelo regional al 9 de noviembre.

Tal vez los redactores de la página web de Botnia (www.metsabotnia.com.es) estén siendo sometidos a la inhalación de sustancias indescifrables, cuando escriben:

“Producimos de manera ecológica y éticamente sostenible pasta papelera a partir de madera finlandesa certificada. Con nuestra pasta se elaboran papeles de buen corazón. Tenemos el placer de presentar a Botnia y su gente, la familia Botnia, y nuestra filosofía humanista, responsable, y de cooperación con nuestros clientes”.
Humanismo, ética, cooperación, responsabilidad, corazón, familia. Frente a eso, la Asamblea Regional Argentina – Uruguay emitió un comunicado declarando el 9 de noviembre, cuando la planta de Fray Bentos se puso en marcha, como “Día de duelo regional”. Y escribieron otras palabras.

“Expresamos nuestro absoluto repudio al inicio de las operaciones de la empresa Botnia. En este sentido, hemos resuelto instituir como día de duelo regional el 9 de noviembre, fecha que con el correr del tiempo se convertirá en el triste emblema de un proceso de contaminación y sometimiento a intereses extranjeros sin precedentes en la región.
La finlandesa Botnia comenzó a funcionar oficialmente, y generó una nueva tensión entre los presidentes Tabaré Vázquez y Néstor Kirchner, verificada durante la llamada “cumbre” iberoamericana perpetrada en Chile. Gustavo Rivollier, integrante de la Asamblea Ciudadana de Gualeguaychú duda ante lavaca: “A veces uno no sabe si pensar que hasta esos supuestos enfrentamientos son un circo más”. La desconfianza se fundamenta en los cuatro años de vaivenes, ninguneos, falsedades y confusiones que sintieron como principal contenido de la política exterior del gobierno argentino.

¿Cuál es el clima en Gualeguaychú? El sábado hubo una triple marcha, por aire, agua y tierra: “Hablan de 50.000 personas pero la verdad es que habrán sido unas 25.000” dice Rivollier, “lo cual es impresionante porque no hubo prácticamente convocatoria ni organización previa”. Para jugar con las proporciones en comparación con la población, es como si en la ciudad de Buenos Aires se hubiesen movilizado 800.000 personas.

“Y este domingo se empezó a oler a repollo podrido” relata Rivollier. La página de Botnia reconoce el mismo aroma como “coliflor hervido” y asegura que pronto se solucionará.

Hubo gente que estaba cerca de la costa, del lado argentino, que empezó a descomponerse. El “coliflor hervido” es el mismo ácido sulfúrico que intoxicó en agosto a decenas de obreros en Botnia. Luis Quinteros (entrevistado en Mu de septiembre) fue uno de los principales afectados y está motorizando en Fray Bentos una campaña de denuncia contra la empresa.

Rivollier: “Acá está todo el mundo muy caliente pero con mucha fe en que vamos a lograr el objetivo. Siempre dijimos que había que evitar que se construyese, y si se construía había que evitar que funcionase, y si funciona hay que lograr que cese y se vaya. Ese es el paso en el que estamos ahora”. La Asamblea está pensando cantidad de medidas “para que quede claro que no tienen licencia social”. El término licencia social se refiere al acuerdo que una comunidad presta, o no, a los emprendimientos que considera nocivos para su vida.

En el caso de Gualeguaychú, el rechazo a Botnia y el corte internacional que ya lleva un año ininterrumpido impidiendo el cruce fronterizo a Fray Bentos, permitió comprender no sólo el problema de la contaminación el agua y el aire, sino la instalación de un nocivo modelo de (sub) desarrollo basado en el monocultivo de eucaliptos, el saqueo consiguiente del agua dulce, el desempleo, la expulsión de la gente de los campos, la concentración de las tierras y el empobrecimiento generalizado.

El luto

Al mismo tiempo continúa creciendo la acción de la Asamblea Regional Argentina – Uruguay, creada en octubre y que se presentó en Buenos Aires el pasado 26 de octubre con una conferencia de prensa frente al Congreso. Una especie de “Uruguaychú”, donde Gualeguaychú empezó a encontrar sus equivalentes uruguayos, productores de todo el país, vecinos y ciudadanos que silenciados por las autoridades orientales empezaron a organizarse en asamblea en rechazo al modelo de pasteras y monocultivo del cual Botnia parece ser apenas el botón de muestra, mientras la española Ence, expulsada de Fray Bentos por la movilización social en Gualeguaychú, espera instalarse en Conchillas, cerca de Colonia, cosa que ya está provocando una movilización social en esa nueva comunidad afectada.

La Asamblea Regional Argentina- Uruguay se reunió el sábado 10 en Colonia Agraciada, Soriano, frente al predio de ISUSA, abastecedora de ácido sulfúrico para Botnia. Este es el comunicado, de solidaridad con Gualeguaychú, de adhesión a la marcha convocada por la Unión de Asambleas Ciudadanas para el 12 de diciembre en Plaza de Mayo, y de convocatoria a una nueva reunión de la Asamblea Regional en Tacuarembó. El texto completo:

"Comunicado de Prensa: El río Uruguay está de luto

Colonia Agraciada, Departamento de Soriano, Uruguay

10 de noviembre de 2007

“Esta tarde, frente al predio de ISUSA —empresa que abastecerá de ácido sulfúrico a la pastera Botnia—, delegados de las distintas organizaciones sociales y ambientalistas que conforman la Asamblea Regional nos reunimos con el propósito de acordar nuestros próximos pasos y fortalecer los lazos que desde siempre han unido a los pueblos que habitamos ambas márgenes del río Uruguay.

Expresamos:

-Nuestro absoluto repudio al inicio de las operaciones de la empresa Botnia. En este sentido, hemos resuelto instituir como día de duelo regional el 9 de noviembre, fecha que con el correr del tiempo se convertirá en el triste emblema de un proceso de contaminación y sometimiento a intereses extranjeros sin precedentes en la región.

-Nuestra indeclinable solidaridad con la lucha que desde hace años lleva adelante el pueblo de Gualeguaychú.

-Nuestra profunda inquietud ante el posible establecimiento de una planta siderúrgica de la empresa Río Tinto sobre el río Uruguay, en el sur del Departamento de Soriano, Uruguay, a 20 kilómetros de Nueva Palmira.

-Nuestra condena y consternación ante el asesinato de Valmir Mota de Oliveira, miembro del Movimiento Sin Tierra, del Brasil, ocurrido el pasado domingo 21 de octubre. Este crimen no es otra cosa que la reacción brutal de un sistema irracional ante la verdadera y digna rebeldía de los que cada día luchamos por la construcción de un mundo donde imperen la justicia y la equidad. Muerte que, parece ignorarlo el poder político-económico, nos otorga más y más vida. Enviamos al MST todo nuestro apoyo y solidaridad.

Resolvemos:

-Realizar la segunda reunión de la Asamblea Regional en la ciudad de Tacuarembó, Uruguay, el domingo 16 de diciembre, y apoyar la protesta contra la forestación que se realizará en dicha ciudad el 15 de diciembre.

-Adherir a la marcha que el próximo 12 de diciembre, a partir de las 12:00, la Unión de Asambleas Ciudadanas llevará a cabo en Plaza de Mayo, Buenos Aires. En concordancia con esta jornada de lucha, convocamos a una marcha en Montevideo, el mismo día, a la misma hora, en lugar a definir. -Coordinar acciones conjuntas contra este modelo fundado en el saqueo de nuestros bienes naturales, la extranjerización y concentración de la tierra en pocas manos, y el menosprecio de nuestra dignidad.www.ecoportal.net

Asamblea Regional Argentina-Uruguay.

. Productores de Colonia Agraciada, Soriano.
. Asamblea Ciudadana Ambiental de Gualeguaychú, Entre Ríos.
. Movimiento de Chacreros de Mercedes.
. Asamblea Ciudadana Ambiental de Concepción del Uruguay, Entre Ríos.
. Asamblea Tacuarembó.
. Delia Villalba, ambientalista de Fray Bentos.
. Movimento Sem Terra (MST), Santana do Livramento, Brasil.
. Movimiento por el Trabajo, la Vida y el Desarrollo Sustentable, Fray Bentos.
. Comisión Multisectorial, Montevideo.
. Asamblea del Callejón, Montevideo.
. José Bautista, secretario general del Sindicato de los Trabajadores de la Forestación de Rivera.
. Asamblea Ciudadana Ambiental de Colón, Entre Ríos.
. Asamblea Popular Ambiental de Colón, Entre Ríos.
. CONCORVIDA- Asamblea de Concordia, Entre Ríos.
. CONOSUR (Comisión Nacional de Organizaciones Sociales del Uruguay)
. El Agua Manda, Gualeguaychú, Entre Ríos.
. Chasque Artiguista, Uruguay.
. Red Nacional de Acción Ecologista de la República Argentina, Santa Fe.
. José Antonio Echenagusía, productor rural, Paso de los Toros
. Frente Popular Darío Santillán, Argentina.
. Joselo Schuap, Gira H2O, Misiones, Argentina.
. Andrés Zavattiero, Ituzaingó, Esteros del Iberá, Corrientes.
. Colectivo Testimonios, Montevideo.
. Fundación Integradora Latinoamericana Ambiental
. Grupo Sierras de Rocha
. Víctor Cardona, productor de Mercedes
. César Ortiz, Grupo Eco-Tacuarembó.
. Gustavo Cassola Perezutti, abogado ambientalista, Carmelo.
. Organizaciones campesinas y de pequeños productores de las provincias de Entre Ríos, Corrientes y Misiones, Argentina.
. Asamblea Vecinal de Carapachay, Buenos Aires.
. Comisión Fomento del Centro de Acción (CE.AC.)
. Grupo Avanzar, San José, Uruguay.
. UNAMU (Uruguay Natural y Multiproductivo)

Nuestro pecado es defender lo que nos pertenece”

 

 

¿Crisis del agua? por Andrés Barreda

16-03-06

El peor problema de la actual crisis del agua es la forma en que las empresas trasnacionales, gobiernos e instituciones globales pretenden resolverla. Sin criticar las técnicas y políticas económicas e hídricas que responden a dinámicas en las que las empresas y estados se hinchan de ganancias y poder

La crisis del agua es real y grave. Se compone de una severa pérdida paulatina de un recurso que está dejando de ser renovable. De una pérdida alarmante de la capacidad de acceso de las comunidades a este bien. Incluso en regiones que no hace mucho eran de abundancia, como Chiapas. Pérdida por sequía, aunada a la sobreabundancia destructiva, y pérdida por contaminación y degradación galopante de la calidad del agua. Su injusta distribución se suma a lo anterior como uno de los problemas más graves.

Aun así, conceder que estamos frente a una simple “crisis del agua” es una trampa porque en realidad estamos frente a la crisis capitalista del agua. Resultado de la depredación que dispara la persecución de ganancias infinitas y su producción industrial masiva, la superpoblación que necesariamente requieren las manufacturas, el crecimiento salvaje de las ciudades y la depredación de agua de la revolución verde, como sustento del desarrollo fabril, demográfico y urbano. Consumo destructivo de agua que se sale de madre en el neoliberalismo, en virtud de las pautas antiambientales salvajes de esta forma de acumular.

Es verdad, el capital mundial está preocupado por el severo estado de destrucción en que se encuentra la base hídrica de su riqueza planetaria. Pero también está molesto por tener que asumir de alguna manera el proceso de reproducción de la vida humana y natural a largo plazo. Cosa que durante la bacanal del neoliberalismo olvidó por completo. Su enojo se explica porque tal crisis expone ante todos la incapacidad del capital para asegurar el desarrollo de la vida.

Pero el enojo, combinado con el sentido de oportunidad que caracteriza a las empresas y la paranoia de los grandes poderes políticos, ha trasmutado en un impulso privatizador del agua dulce y la biodiversidad del mundo, así como en una furia geopolítica por el control del recurso. Aprehensividad que se apuntala con la pulsión por la manipulación científico-técnica, como neutralización y maquillado de las catastróficas destrucciones ambientales y de la salud acumuladas en el siglo XX.

Cuando Alberto Cárdenas, ex secretario de Medio Ambiente, amenazó a los mexicanos advirtiendo que pagaríamos el agua hasta que doliera, expresó, tal vez sin saberlo, el enojo histórico que el capital tiene consigo mismo; pero a la manera transfigurada en un enfado paternal de tecnócrata empresario contra los ignorantes que no entienden la necesidad de privatizar el servicio.

La energía que el capital podría emplear autocriticando su propio rumbo, la dilapida y oculta como inquina contra los que defienden al agua como bien común, y como enfado contra quienes exigen respeto al medio ambiente con base en el principio de precaución y en contra de la introducción precipitada de ciencias y técnicas riesgosas, sean mundialmente desprestigiadas y agotadas como las represas, o sean las innovaciones técnicas de actuales panaceas como la ingeniería genética y la nanotecnología.

Después de varios siglos de saqueo y desarrollo salvaje del planeta, la ira que el capital siente por el caos creado en su propio fundamento hídrico y biológico no puede aparecer a los ojos de la humanidad como la necesidad de autocrítica del mundo material creado por él, porque tal civilización, resultado de la dictadura del mercado, la ciencia y la tecnología, es sagrada y no se debe ni se puede cuestionar. Por ello, sólo logra hablar de crisis mundial del agua a secas.

Los objetivos generales del cuarto Foro Mundial del Agua, son la preparación ideológica de los capitales y la población con vistas a la monopolización privada del recurso, la coordinación de múltiples expropiaciones rurales y urbanas con vistas al control del agua, la articulación de las inversiones y las políticas hídricas con las nuevas legislaciones de cada Estado nacional y el desarrollo técnico de punta en el control del recurso.

El peor problema de la actual crisis del agua es la forma en que las empresas trasnacionales, gobiernos e instituciones globales pretenden resolverla. Sin criticar las técnicas y políticas económicas e hídricas que responden a dinámicas en las que las empresas y estados se hinchan de ganancias y poder; sin tener en cuenta seriamente las formas colectivas y democráticas, tradicionales o nuevas, de reproducir y optimizar técnicamente, sin monopolización alguna, el aprovechamiento del agua.

 

Semblanza sobre los manantiales Los Colomitos, Guadalajara.

Los Colomitos, un dilema a resolver: ¿Área natural protegida o desarrollo habitacional? ¿Qué proyecto de ciudad se quiere impulsar?

 

 

Mtro. Hirineo Martínez Barragán

Departamento de Geografía y Ordenación Territorial

Universidad de Guadalajara

  La ciudad de Guadalajara ahora (en octubre de 2007) cuenta con aproximadamente 4.3 millones de habitantes distribuidos en los municipios de Guadalajara, Zapopan, Tlaquepaque, Tonalá, El Salto y Tlajomulco. Esta ciudad, entre uno de los principales aspectos que la caracterizan, es el hecho de mantener una estructuración horizontal con edificaciones bajas, predominantemente de uno o dos pisos, lo cual da como resultado una ciudad muy extendida. La superficie aproximada de la Zona Metropolitana de Guadalajara era aproximadamente de 34,000 Has., en el año 2000 y de 36,000 Has. en el año 2005; sus dimensiones aproximadas eran el año del 2000 de 28.128 Kms. de oeste a este, y de 31.859 Kms. de norte a sur, considerando los puntos más extremos.

Estas características de ciudad, ha traído en consecuencia una polémica local que ya tiene más de tres décadas. Por un lado hay quienes se pronuncian en el sentido de que se debe de mantener la ciudad baja y extendida, pero por otro lado hay quienes defienden la idea de que la ciudad debe comenzar a crecer verticalmente como producto de una política pública; quienes defienden la horizontalidad sustentan su posición en la tradición y en el argumento de que los tapatíos no sabemos vivir en condominios, en contraparte quienes impulsan la idea de hacer crecer la ciudad verticalmente ven como favorable la redensificación para con ello acortar las distancias entre los distintos puntos de la ciudad y ganar espacios para otros usos del suelo.

Otro aspecto que abona hacia la misma discusión, son los crecientes problemas de tránsito por la ciudad y también el aumento en los índices de contaminación, los cuales repercuten negativamente en los indicadores de calidad de vida de los tapatíos; los altos niveles de contaminación en particular se hacen noticia cotidiana durante el periodo de noviembre a mayo de todos los años, repitiéndose las contingencias ambientales durante casi todos los días sobre todo por el rumbo sur-sureste de la ciudad (más específicamente en la colonia de Miravalle).

En ese mismo sentido, otro aspecto relevante que permite darle contexto al asunto que aquí nos ocupa, es el hecho de que Guadalajara desde sus orígenes (1542) ha padecido escasez de agua; sus fundadores una vez asentados se enteraron que las aguas del manantial Agua Azul y del río San Juan de Dios eran aguas “pesadas” no recomendables para el consumo humano_; por ello iniciaron en las cercanías una búsqueda por todos los rumbos, a efectos de satisfacer esa carencia; concluyendo en todas los exploraciones que las mejores aguas eran las de los manantiales de Los Colomos, pero fue hasta 1900 que se pudieron llevar dichas aguas a la ciudad, al comprar bombas alemanas que elevaron el agua a estanques para luego ser conducida por gravedad. Antes, los abastos de agua provenían de Toluquilla, San Andrés y El Colli. Los manantiales de Los Colomos y Los Colomitos (aguas abajo), forman parte de la cuenca hidrográfica del río Atemajac, el cual drena la parte noroeste y más baja de la ciudad.

Antecedentes.
Los manantiales conocidos como Los Colomitos eran a principios del siglo XX aproximadamente doce, los cuales se ubicaban hacia el rumbo norte de la ciudad sobre distintos afluentes de la margen derecha del río Atemajac, algunos de los cuales en su momento constituyeron lugares de paseo, baños y lavaderos, mismos que sirvieron de inspiración a una de las estrofas de la canción de Pepe Guízar: Guadalajara, Guadalajara que dice: ¡Ay!, colomitos lejanos. ¡Ay!, ojitos de agua, hermanos. ¡Ay!, colomitos inolvidables, inolvidables como las tardes en que la lluvia desde la loma no nos dejaba ir a Zapopan. Sin embargo poco a poco esos lugares fueron invadidos y borrados por la ciudad, sucumbiendo en aras de la urbanización y el “progreso”. De ellos como único testimonio queda el que ahora está ubicado por la avenida del Federalismo Norte No. 2135 entre Manuel de Mimbela y Fidel Velázquez, mismo que es el objeto de este análisis dada la polémica que se ha generado entre vecinos y autoridades municipales, como producto de la autorización de una licencia de construcción sobre dicho predio a finales de 2006.

En las montañas de Juárez, un capitalismo indígena

Vientos de desarrollo soplan desde hace 30 años en la Sierra Norte de Oaxaca, cuna zapoteca del liberal Benito Juárez, donde se vive hoy una silenciosa revolución económica, modelo esperanzador para diez millones de indígenas que apenas sobreviven en el país.

¿Socialismo utópico o capitalismo social? Lo cierto es que en el mundo indio de México, donde casi siempre los experimentos políticos y económicos se topan con el fracaso, los zapotecas de las frías montañas que vieron nacer a Benito Juárez García hace dos centurias, al norte de Oaxaca, logran hoy una exitosa revolución económica sin traicionar sus raíces.

Capitalismo a la indígena, acumulador, previsor, administrador de recursos naturales antaño saqueados, comunal, igualitario y observante de usos y costumbres, más no de “abusos y costumbres”, como dice irónicamente Luis Pacheco Rodríguez, el presidente de bienes comunales de Ixtlán de Juárez. Y no obstante, abierto al mundo, adoptando progresos tecnológicos bajo premisas como la competitividad, la alta calidad, la no resistencia a los cambios, y siempre atemperado por una prudencia empresarial y una autocontención personal (o sea, el ejercicio de la virtud, según los moralistas clásicos) que encomiaría cualquier rígido funcionario del Banco Mundial (BM).
“Aquí hay algo muy importante: como están las comunidades constituidas aquí, lo importante es que no hay envidias”, sigue el comisariado de Ixtlán. “Todos trabajamos para la comunidad y para beneficio propio, y en cambio, en otros lugares, los proyectos no se logran por los problemas internos, que las dividen […] son las envidias que no dejan que crezcan”.

Ver documento en pdf. 6.6 M, 4 páginas

Resistencia, autonomía y sustentabilidad

Lucio Díaz Marielle Revista Rebeldía 2005 Las comunidades rurales han mantenido a través de sus saberes, formas de organización y sistemas normativos, diversos mecanismos y estrategias para integrar la vida … Seguir leyendo Resistencia, autonomía y sustentabilidad

¿Sabes qué tipos de agroquímicos llegan hasta tu mesa y cómo te pueden afectar?  🌽 😨

Pon a prueba tus conocimientos y descubre datos sorprendentes sobre esta iniciativa.
🎯 ¡Juega y aprende!

 Ir a la trivia