Con daños irreparables por la sequía, más de 1.5 millones de hectáreas de sembradíos

10 agosto 2009

10 de agosto de 2009

La sequía que afecta a la mayor parte del país ha causado daños irreparables en alrededor de un millón 553 mil 138 hectáreas de cultivos en Guanajuato, Zacatecas, Hidalgo, Querétaro, Nuevo León, Durango, Aguascalientes, Michoacán, Campeche, Veracruz y Morelos, con pérdidas aún incuantificables para miles de agricultores y ganaderos.

Otras 809 mil 616 hectáreas sembradas presentan diversos niveles de afectación en Zacatecas, Tamaulipas, Yucatán, Puebla, Sinaloa, Morelos y estado de México, cuyos productores alertan que de no haber un incremento de lluvias en los próximos días, los daños podrían ser catastróficos.

Además, al menos 16 mil 800 reses han muerto en Yucatán, Tamaulipas y Campeche, y en hatos de otras entidades es muy grave la falta de alimento para los animales.

A pesar de la grave situación, son mínimos los apoyos que autoridades estatales y de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) destinan al sector.

Guanajuato, el estado con menos lluvias

Hasta ahora, el estado más castigada por la sequía es Guanajuato, donde 70 por ciento de las 500 mil hectáreas de temporal de maíz y sorgo (350 mil) se perdió por falta de lluvias, informó el presidente de la Confederación Nacional Campesina (CNC) local, Jorge Ramos.

El delegado de la Sagarpa en Zacatecas, Leonel Cordero, dijo que si bien no hay un reporte exacto sobre los daños en la agricultura y la ganadería, 300 mil hectáreas agrícolas se quedaron sin ser sembradas. Otras 450 mil sí fueron plantadas, pero están en riesgo de afectación grave por el estiaje.

La Unión Ganadera Regional señaló que urgen apoyos para 150 mil cabezas de ganado mayor perjudicadas por la sequía y la falta de forrajes. Las grandes presas del estado están a 50 por ciento de su capacidad.

En Querétaro, unas 270 mil hectáreas de cultivo (120 mil de maíz y frijol y 150 mil de siembra de temporal) se han perdido por la sequía, en perjuicio de 50 mil productores, según la CNC.

De acuerdo con la Comisión Nacional del Agua, julio fue el mes más seco de los pasados 68 años en la entidad, lo que ha ocasionado que las 33 presas y bordos se encuentren a 30 por ciento de su capacidad, cuando en agosto de 2008 estaban a 95 por ciento.

La Secretaría de Agricultura de Hidalgo dio a conocer que 361 mil 664 hectáreas de cultivo han resultado afectadas, principalmente a causa de la sequía.

La falta de lluvias en Nuevo León ha causado estragos en la agricultura y la ganadería. En muchos ranchos del norte y noreste del estado, los productores deben llevar agua en pipas para que sus animales no mueran de sed. Los sembradíos de maíz, con una superficie calculada en más de 100 mil hectáreas, prácticamente se quemaron por las altas temperaturas y la ausencia de precipitaciones pluviales, con lo que los plantíos no serán aprovechables ni como forrajes.

De las 246 mil hectáreas que se destinaron para la siembra de frijol y maíz en Durango, 75 mil no pudieron ser plantadas, debido que en junio no llovió lo suficiente para la preparación de la tierra, reportó la CNC local.

Arturo Rivas, ex presidente de la Unión Ganadera de Durango, alertó que los bordos de abrevaderos están casi secos. El pasto o alimento para el ganado se acaba.

De las 101 mil hectáreas de temporal programadas para la siembra en Aguascalientes, sólo 64 mil fueron plantadas con maíz y frijol; sin embargo, la totalidad se perdió por falta de agua. Los productores se declararon en estado de emergencia, afirmó Carlos Estrada, líder de la Liga Agraria.

A causa de la sequía, en 21 de los 112 municipios de Michoacán se han perdido 19 mil 683 hectáreas de diferentes cultivos, principalmente maíz, sorgo y aguacate.

La pérdida de por lo menos 5 mil 155 hectáreas de maíz, y la muerte de 300 reses por falta de agua y pasto es el saldo que ha dejado dicho fenómeno meteorológico en Campeche.

Al menos 20 de los 212 municipios veracruzanos padecen severo estiaje, entre ellos Palma Sola, Actopan, Puente Nacional, Paso de Ovejas y Córdoba, con pérdidas de 8 millones de pesos.

El dirigente de la Unión de Productores de Arroz, Pedro Díaz, informó que se han perdido 25 por ciento de las 15 mil hectáreas (3 mil 800) sembradas en la Cuenca del Papaloapan.

A su vez, el presidente de la Unión Ganadera de Veracruz, Félix Castellanos, reveló que los hatos reportan descenso de peso de los animales de hasta 30 por ciento y el riesgo de muerte por la escasez de agua está latente.

La sequía que desde principios de 2009 azota a Yucatán, con temperaturas de hasta 45 grados centígrados, la escasez de lluvias y los incendios forestales han dañado 150 mil hectáreas de maíz, con pérdidas de más de 300 millones de pesos en perjuicio de 45 mil campesinos. Además, 15 mil reses han muerto y la producción de miel se desplomó 50 por ciento.

En Puebla, 60 mil 816 hectáreas de cultivo han resultado perjudicadas por la falta de precipitaciones pluviales en los pasados tres meses, en detrimento de 24 mil 327 productores, principalmente de maíz, en 59 de los 217 municipios del estado.

Al menos 180 comunidades de los municipios sinaloenses de Choix, Badiraguato, Sinaloa de Leyva, Cosalá, San Ignacio y El Fuerte padecen sequía, con afectaciones para unas 35 mil personas. En el sur del estado han resultado afectadas 21 mil hectáreas sembradas con frutales y hortalizas.

De las 80 mil hectáreas de sorgo y maíz que se siembran cada año en Morelos, al menos 8 mil fueron afectadas por el gusano cogollero y soldado, a causa de la falta de lluvias; de éstas, 4 mil 500 se perdieron totalmente.

En el estado de México, el fenómeno no ha sido tan severo y hasta ahora ha ocasionado afectaciones en diferentes niveles en 3 mil 800 hectáreas.

Los 40 grados centígrados que en promedio registra Tamaulipas mantienen en riesgo de siniestro a 120 mil hectáreas de las 432 mil proyectadas para el ciclo primavera-verano.

Víctor de León, secretario de Desarrollo Rural de la entidad, informó que si no llueve en 15 días se habilitará el seguro agrícola catastrófico, con cobertura para 80 mil hectáreas.