El goberndor Andrés Granier Melo desmintió los rumores que se han propagado en las redes sociales, en el sentido de una inminente nueva inundación en Tabasco.

El gobernador dijo que, por el contrario, se ha descartado una nueva contingencia debido a que los últimos reportes de las agencias encargadas han dicho que en el mes de octubre lloverá menos de lo previsto.

“Me conforta que los pronósticos para estos días indican que habrá un 25 por ciento menos de las lluvias que se esperaban para octubre lo que permitirá soportar un poco más”.

Aunado a lo anterior, las obras hidráulicas tienen la capacidad de enfrentar la amenaza de una nueva creciente.

“Tabasco no se volverá a inundar porque las obras hidráulicas realizadas van a cumplir la función para la que fueron construidas”, reiteró.

Informó que ya se están colocando costales de arena en la vía Villahermosa-Nacajuca, así como en el poblado de Chablé, enEmiliano Zapata.

“La obra hidráulica va a contener el agua pero hay que estar atentos a los boletines que emitan los medios y no dejarse llevar por la rumorología”, insistió.

Informó que en estos días ha habido un fuerte norte sobre el sureste mexicano que está afectando a la entidad, pero afortunadamente no con lluvias torrenciales como se había previsto en un inicio.

Estamos viviendo el cordonazo de San Francisco que ha llegado con un fuerte norte sobre el sureste mexicano y nos va afectar pero no con lluvias torrenciales,

A la par de este panorama favorable, el químico admitió la complicada que atraviesa la zona de los ríos ya que el Usumacinta está muy arriba de su nivel y escala crítica.

Al respecto señaló que las autoridades de Tabasco están ofreciendo toda la ayuda necesaria a los damnificados.