Hermosillo • El gobernador de Sonora Guillermo Padrés Elías, desestimó el acuerdo tomado por las bancadas del PRI, PRD y Movimiento Ciudadano para que la PGR inicie en su contra un juicio de procedencia en la Cámara de Diputados.

El hecho se refiere al presunto desacato del mandatario sonorense a quien las autoridades judiciales le ordenaron suspender la obra del Acueducto Independencia que acarreará agua para consumo de cerca de 900 mil hermosillenses.

“Si alguien busca enjuiciar al gobernador Padrés por llevarle agua al que no tiene, que así sea, yo voy a seguir defendiendo a la gente y nada me va a detener, absolutamente nada”, precisó.

El pasado 19 de junio integrantes de las bancadas del PRI, PRD y MC impusieron su mayoría y aprobaron en la Primera Comisión de Gobernación, Puntos Constitucionales y Justicia un punto de acuerdo para iniciar juicio de procedencia en contra del jefe del gobierno estatal.

Desde del inicio de su administración, Padrés anunció que su tarea principal sería resolver el problema de abasto de agua para decenas de poblaciones del estado que ven demorado su crecimiento por la falta del vital líquido.

El panista que luego de siete décadas en el poder, en 2009 echó del palacio de gobierno al PRI, conformó un plan con inversiones millonarias para ejecutar obras hidráulicas en varias ciudades y población rurales de Sonora.

La “cereza del pastel” de ese plan es el Acueducto Independencia, que desde la presa “El Novillo” y una distancia de cerca de 150 kilómetros, traerá anualmente a Hermosillo 75 millones de metros cúbicos de agua para acabar con el desbasto doméstico de la capital.

La presa forma parte del sistema del Río Yaqui y agricultores de la zona de Ciudad Obregón decidieron ampararse en contra del proyecto, alegando que dejaría sin agua a miles de hectáreas agrícolas.

El proceso judicial continua pero el Acueducto Independencia lleva más de 50 por ciento de avance con una inversión superior a los 4 mil millones de pesos, dinero provisto por el gobierno federal.