Para el 2050 se prevé mayor “estrés hídrico” para el Estado de México, al igual que la parte norte del país, lo cual traerá consigo riesgos económicos, como el hecho de que no se concreten inversiones en determinado lugar y presiones de tipo presupuestal.
Durante su participación en el foro: “Presente y Futuro del Agua”, María Fernanda Nieto y Karla González Sáenz, asociada y directora de Finanzas Públicas Internacionales (Latam), respectivamente, señalaron que el “estrés hídrico” se presenta cuando la demanda de agua es más alta que la cantidad disponible.