En Colombia, imponen la multa más alta a contaminador del río Tunjuelo

10 enero 2011

20 de diciembre de 2011
Fuente: El Tiempo

Dueño de curtiembre en Bogotá deberá pagar 1.287 millones de pesos y 30 meses de prisión.

Esta, que es una de las multas más altas impuestas contra un empresario por no tramitar permiso de vertimientos y descargar líquidos contaminantes al río Tunjuelo, fue dispuesta por el juzgado 19 penal contra Julio Alberto Lizarazu, dueño de la curtiembre Nápoles, que funciona en el sur de Bogotá.

Además, el propietario de la fábrica tendrá que cancelar la multa, en el término de 90 días y pagar 30 meses de prisión.

Lizarazu ya había sido sancionado antes por la misma causa: verter aguas residuales contaminadas al río Tunjuelo, con anterioridad al año 2006.

Pese a que la Secretaría Distrital de Ambiente le había ordenado al fabricante suspender las actividades por no contar con el permiso legal para hacer los vertimientos, la curtiembre seguía operando, dijo la entidad.

Así lo comprobó el CTI de la Fiscalía, tras una inspección realizada a la fábrica. Verificó que en el sitio seguían procesando curtiembres de cueros azules y que, en el momento de la visita, estaban listos para secar, sin que en la fábrica funcionara una planta de tratamiento de aguas residuales para controlar los líquidos contaminantes que se vertían al Tunjuelo.

El abogado de Lizarazu pidió al juzgado cambiar el castigo y las sanciones por trabajos sociales, al argumentar que el dueño de la curtiembre no tiene los 1.287 millones de pesos para pagar la multa. Incluso no ha pagado las facturas por los servicios públicos del agua y la luz.

Sin embargo, el juzgado negó esa pretensión y ratificó la multimillonaria multa.