En el Día Mundial del Hábitat, crisis ambiental: 20% menos agua

03 octubre 2011

03 de octubre de 2011
Fuente: Noticias.net

Oaxaca, Oax.- Oaxaca: en residencias disponen de 500 litros diario; los pobres, 30 litros; 150 aconseja ONU

Estimaciones más recientes de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) sugieren que el cambio climático será responsable del alrededor del 20 % del incremento de la escasez global de agua en el planeta. Mientras que las proyecciones a 2050 –a sólo 39 años- pintan un escenario crítico: un tercio de la población en el mundo vivirá con menos de 100 litros de agua al día.

Es por ello que al conmemorarse hoy 3 de octubre el Día Mundial del Hábitat bajo el tema “Las ciudades y cambio climático”, organizaciones ambientalistas y la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), coincidieron al señalar que el reto es lograr la disponibilidad suficiente y una distribución equitativa del agua para garantizar la seguridad nacional.

En Oaxaca, la precariedad en la disponibilidad y disparidad en la distribución del agua es una realidad escalofriante.

Mientras que la Organización Mundial de la Salud (OMS), considera que la cantidad de agua potable por persona debiera ser de 150 litros diarios, de acuerdo con el Foro Oaxaqueño del Agua, en zonas marginadas de la capital, la disponibilidad por persona a penas llega a 30 litros diarios, mientras que en las zonas residenciales es de hasta 500 litros por persona.

Carlos Plascencia, integrante del Foro Oaxaqueño del agua, indicó que los efectos de la urbanización y del cambio climático están convergiendo en peligrosas direcciones que suponen una seria amenaza para la estabilidad medioambiental, económica, alimentaria y social del mundo.

“El rumbo que se tiene en las ciudades no parece sensato, más bien se están agravando las cosas, se están alterando los ciclos del agua. Llueve mucho en una época o no llueve nada. Son círculos viciosos de inundaciones y sequías, es por eso que se tiene que entender de mejor manera la naturaleza y relacionarnos con ella de mejor manera”, declaró.

Más concreto, menos agua

En este crecimiento no sustentable de las ciudades y hasta desordenado, expuso Carlos Plascencia, la afectación es exponencial.

El crecimiento actual de las urbes lleva inherente el incremento de la plancha de concreto y la devastación de áreas verdes, lo que está derivando en una menor recarga de los mantos freáticos.

“Esto nos esta llevando a sacar más agua de la que está entrando y mientras tengamos más construcciones tendremos menos agua”, manifestó.

El crecimiento de la plancha de concreto, sostuvo, tiene doble impacto negativo: las también llamadas islas de calor que son las culpables del incremento en la temperatura y que ocasiona que en las zonas urbanas registren entre uno y dos grados centígrados más que en las zonas rurales.

El fenómeno de la elevación de la temperatura en zonas urbanas densamente construidas se ocasiona por una combinación de factores tales como la edificación, la falta de espacios verdes y los gases contaminantes, principalmente.

Otro efecto es la disminución del período frío del invierno y extender el de verano, adelantando la primavera y retrasando el otoño.

El agua, al caño

Debido a la falta de cultura del respeto y cuidado del agua, más del 50 por ciento del vital líquido disponible en casa, se va por el caño en las descargas para el inodoro y el aseo personal diario como lavarse los dientes y ducharse.

El delegado de la Semarnat en Oaxaca, Esteban Ortiz Rodea, indicó que urge la reflexión en alternativas para tener un uso adecuado de los recursos naturales.

“Las poblaciones están creciendo de manera desordenada, crecen a cualquier lado sin importar los sistemas de gestión ambiental o de aprovechamiento del agua, esto tiene que ver con ser responsables desde todos los ámbitos”, declaró.

El funcionario federal consideró crucial comenzar un proceso de adaptación y mitigación sobre la escasez de agua que se prevé a menos de 40 años.

La adaptación, explicó, implica la utilización de menos agua y su reciclado. En los hogares, por ejemplo, reciclar el agua de la lavadora o ducha para el inodoro. “Es inconcebible como en los sistemas sanitarios, se pierden de 8 a 15 litros por menos de 50 mililitros de orín, esto es inconcebible”.

En el tema de mitigación, declaró, se tiene que adaptar infraestructura, por ejemplo en la captación de agua de lluvia o sistemas tratamiento del agua desde los hogares con sistemas sencillos.