En la capital, “tenemos agua para hoy, pero mañana ya no”, afirma experto de la UAM

12 mayo 2014

Operativo de abasto de agua en la delegación Azcapotzalco, el pasado 3 de mayo. Foto José Antonio López

Para ahorrar agua y disponer de reservas de ella, hay que recurrir a medidas como la captación del agua de lluvia, el tratamiento de las aguas residuales y los dispositivos para economizar el agua, pero no resultan eficaces los aumentos en las tarifas del consumo doméstico, pues quienes tienen recursos, la seguirán pagando sin problema en lugar de ahorrarla.

Si bien en las 16 delegaciones de la ciudad prácticamente ya no hay crecimiento de población, el desarrollo económico requiere de agua, por lo que es preocupante que no existan reservas del vital líquido.

El especialista indicó que para enfrentar el problema se requiere de ahorrar agua y de hacer un mejor uso de la que se dispone, además de encontrar nuevas fuentes de abastecimiento, que no consistan en seguir extrayendo agua del subsuelo, pues esto último produce agrietamientos y rupturas del sistema hidráulico.

Otra opción de abastecimiento es la recuperación de volúmenes perdidos por fugas, que en la ciudad de México alcanzan un volumen importante; otra fuente es el aprovechamiento del agua de lluvia, así como tratar el agua que se tira al drenaje a fin de poder usarla de nuevo.

Gómez Reyes mencionó que en la UAM-Iztapalapa “tenemos cien por ciento de captación de agua, toda el agua de lluvia la captamos y la retenemos en aljibes y cisternas”.

En cuanto al aumento de las tarifas del agua como medida para promover el ahorro del líquido, afirmó que la experiencia demuestra que no se logra así ese objetivo, sino solamente el de incrementar la recaudación proveniente del consumo de agua; empero, el uso de aditamentos ahorradores de agua sí ayuda a reducir el consumo.

11 de mayo de 2014
Fuente: La Jornada
Nota de Bertha Teresa Ramírez