En Venezuela, sistema de agua potable bajo sospecha

26 marzo 2012

* Derrames de crudo y descarga de cloacas son advertencia para la salud colectiva

26 de marzo de 2012
Fuente: El Universal (Venezuela)
Nota de Javier Moreno Sucre

El 7 de marzo las comunidades palafíticas apostadas en las riberas del río Catatumbo observaron como restos de petróleo se apostaron en las bases de sus estructuras lacustres.

Ante el hallazgo, los diputados zulianos a la Asamblea Nacional denunciaron que las trazas presentes de combustible “son parte de otro derrame de Pdvsa por falta de mantenimiento, en alguno de los 20 mil kilómetros de tubería que componen la estructura del Lago de Maracaibo”. Rafael Ramírez, ministro de Energía y Petróleo y a su vez presidente de Petróleos de Venezuela, desmintió el informe presentado por la bancada de Primero Justicia y atribuyó a la presencia del químico a un ataque guerrillero en una instalación petrolera instalada al norte de Santander, propiedad de la empresa colombiana Ecopetrol. El argumento de Ramírez fue rechazado por 400 pescadores de las localidades de Ologas y Congo Mirador, quienes están convencidos de que la presencia del crudo es por fuga en la zona central del Lago de Maracaibo. A la fecha, 425 pescadores reportaron la contaminación de peces, 120 familias perjudicadas en sus ingresos y 50 niños con infecciones respiratorias y manchas en la piel, por exponerse a la contaminación del río Catatumbo y beber de sus aguas.

Agua turbia en Carabobo

El Movimiento por la Calidad del Agua en Carabobo ha denunciado, desde hace tres años, que unas 3 millones de personas que residen en los estados Carabobo, Aragua y Cojedes, “toman agua mezclada con restos fecales”, a la vista de las autoridades de Hidrocentro, quienes “se han hecho la vista gorda ante una crisis de salud pública evidente”. Cada segundo, 14 mil litros de agua no tratada químicamente caen al Lago de Valencia por medio de un trasvase (traslado de agua de una cuenca a otra), provenientes de las plantas Zuloaga y Baldó, estructuras incapacitadas de potabilizar el líquido debido al nivel actual que presenta el Lago de Valencia.

“El inexistente plan de obras hidráulicas desde el año 1999, hace que el embalse de Pao Cachinche (receptor del líquido de las plantas de La Mariposa y Los Guayos, entre otras), reciba agua contaminada, no las filtre como es debido, se las suministra a la población, y las recibe de retorno”, denunció el diputado regional de ´Proyecto Venezuela, Germán Benedetti.

Por su parte, Manuel Pérez, miembro del Movimiento por la Calidad de Agua, aseguró que este grupo ha recopilado centenares de denuncias de personas afectadas por la presencia de tumores malignos, infecciones en el páncreas, hígado, vesícula y gastritis, entre otras enfermedades crónicas.

El oriente se tiñó de negro

Una fisura en el complejo petrolero de Jusepín, en Monagas, dejó graves consecuencias al ecosistema del río Guarapiche, dejó sin agua por 42 días a 80% de Maturín, acabó con el presupuesto anual de la Alcaldía de la ciudad y, por si fuera poco, incrementó las discrepancias entre el gobernador José Gregorio “Gato” Briceño con el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV).

José Rafael Meléndez, químico jubilado de Intevep, aseguró que en no menos de 18 meses se purificarán las riberas del Guarapiche y que los casos de enfermedades en la población de Monagas, no se harán esperar en los próximos días.

“Fueron 6 mil barriles de crudo derramados en un río gigantesco, que contó con un operativo de saneamiento mínimo”, alertó Meléndez.

El petróleo derramado también estalló en el río Guanipa de la población de Tascabaña en Anzoátegui. En el lugar se perdieron hectáreas de plátano y hortalizas, y se dejó sin agua a miles de ciudadanos, quienes por la militarización, sabían que no tenían agua, pero no las causas por la falta.

El agricultor, Igor Quijada, aseveró que “la falta de información nos dejó sin agua y sin cosecha, además igualitos a la cantante colombiana Shakira, ciegos, sordos y mudos”.

Con información de Marianela Rodríguez, Miriam Rivero, Estrella Velandia y María Luengo.