En Zacatecas, ‘apesta’ proyecto de planta tratadora

20 diciembre 2010

20 de diciembre de 2010
Fuente: NTR Zacatecas
Nota de Saúl Ortega

 

La construcción de una planta tratadora de aguas residuales en la colonia Osiris, en Guadalupe, quedó reducida a la colocación de la primera piedra, porque en 20 meses no se ha presentado el proyecto ejecutivo de la obra que serviría para sanear enormes extensiones de tierras que reciben diariamente miles de metros cúbicos de agua contaminada con desechos urbanos.

Además, el contrato del gobierno estatal con una empresa privada para aprovechar el agua tratada, firmado durante la administración encabezada por Amalia Dolores García Medina (septiembre 2004-2010), no ha sido ejecutado por afectar económicamente a la Junta Intermunicipal de Agua Potable y Alcantarillado de Zacatecas (JIAPAZ).

Se trata de un ambicioso proyecto mediante el que se pretendía erradicar un ancestral problema de contaminación ambiental, por la descarga al aire libre de aguas residuales, principalmente en Guadalupe y una parte de Vetagrande y Pánuco.

De acuerdo con documentos contenidos en el respectivo expediente, la administración de Amalia García Medina, por medio de la Comisión Estatal de Agua Potable y Alcantarillado (CEAPA), cuyo director era Salatiel Martínez Arteaga, pretendía asignar la obra mediante un contrato de Proyecto de Prestación de Servicios (PPS), por 20 años, a la empresa Domos.

En el contrato con el número de identificación CEAPA-SERV-PROMAGUA-2007-01, al cual tuvo acceso NTR Medios de Comunicación, se precisa que la empresa disponía de dos años para la construcción de la planta de tratamiento de aguas residuales en Osiris, y 18 años más para que la operara.

Los pagos por la prestación del servicio quedarían a cargo de la JIAPAZ, e incluso el acuerdo fue avalado por el entonces director de esa instancia, Enrique Alcalá Gallegos, y por Martínez Arteaga; el documento también fue firmado por el representante legal de la empresa, Moisés Jiménez Monroy.

Aparece como testigo, aunque sólo con el nombre y sin rúbrica, el director general de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) en Zacatecas, José Mario Esparza Villalobos, a quien nunca se le presentó el contrato para su firma.

El pago total a 20 años por la contratación de los PPS sería de 157 millones 613 mil 893 pesos.

Con mensualidades de un millón 205 mil pesos se pagarían 456 mil 220 pesos para amortiguar un crédito; 316 mil 555 pesos serían destinados a los gastos de operación y 432 mil 251 pesos costaría, cada 30 días, “la variación posible en el tratamiento de aguas residuales”.

Bajo este modelo, hasta agotarse los 20 años de construcción y operación de la planta, la JIAPAZ tendría que haber pagado cerca de 290 millones de pesos, cuando el costo real de la obra, de acuerdo con el propio contrato, era de 157 millones 613 mil pesos.

La diferencia es de 135 millones de pesos.

Además, el contrato contemplaba, al igual que en el que fue firmado para la construcción de oficinas públicas en Ciudad Gobierno, una cláusula de confidencialidad, que impide a cualquiera de las dos partes divulgar la tecnología utilizada por el constructor y el catálogo de conceptos.

En contraste, se obligaba a la JIAPAZ a entregar todos los datos técnicos relacionados con los volúmenes de agua considerados “para el gasto medio de diseño de la planta, y sus ampliaciones durante el periodo pactado”.

De tal forma que, al detectarse las cláusulas “leoninas”, la actual administración canceló el contrato, dado que había la pretensión de que la empresa comenzara a recibir pagos sin haber presentado siquiera el proyecto ejecutivo de la obra.

A la fecha, la Comisión Estatal de Agua Potable y Alcantarillado de Zacatecas está obligada a realizar por segunda ocasión el proceso de licitación de la obra y rediseñar el contrato que pretendía aplicar la administración de la perredista Amalia García Medina.

Hasta el momento, lo único que existe de este proyecto anunciado desde la administración de Ricardo Monreal Ávila son los colectores de aguas residuales que cruzan por varias colonias del municipio de Guadalupe, mismos que no pueden utilizarse por la falta de la planta tratadora de aguas residuales.

Antecedentes

La primera piedra de la tratadora de aguas residuales fue colocada el 28 de abril de 2009 y a la fecha no es posible ubicar, con precisión, el sitio donde quedó esa primera piedra.

Es la segunda ocasión en que se cancela el contrato, pues hay que recordar que durante el sexenio gubernamental de Ricardo Monreal Ávila se licitó y asignó la obra, pero al iniciar el mandato de Amalia García se canceló el contrato firmado por su antecesor.

Los encargados de colocar la primera piedra, el 28 de abril, fueron la entonces gobernadora de Zacatecas y el director de la Conagua, José Luis Luege Tamargo.

La licitación realizada por García Medina fue presentada el 31 de enero de 2008, y aunque se pretendía iniciar la obra en junio del mismo año, su inicio de operaciones sería un año más tarde.

De acuerdo con el proyecto original, la planta ocuparía una superficie de 10 hectáreas y la inversión sería de 157 millones de pesos.

En ese momento, los ayuntamientos de Zacatecas y Guadalupe tramitaron un crédito con Banorte por 18 millones de pesos comenzar la construcción, pero eso nunca sucedió.

Artículos relacionados
Compartir

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

El crecimiento de las ciudades sin planificación modifica por completo el ciclo del agua.  ¿Cómo podemos incorporar el agua en las dinámicas de la ciudad?  ¿Conoces a las ciudades esponja?   ¿Qué sabes sobre el tema?

¡Pon a prueba tus conocimientos en este tema! ¡Y diviértete!

 Ir a la trivia