Guanajuato retiene agua para Chapala y ahora quiere la del Río Verde: avicultores

25 febrero 2014

Ricardo Estrada de la Torre, presidente de la Asociación de Avicultores de Tepatitlán, contrario a lo dicho por el también avicultor Ezequiel Casillas Padilla, en la pasada mesa de trabajo Agua y Gobernanza, celebrada en el Centro Universitario de Los Altos en días pasados, aseguró que no hay ningún beneficio en la construcción de la presa El Zapotillo, pues al ya no correr el Río Verde no podrían recargarse los mantos subterráneos, que es de donde la mayoría de los productores pecuarios obtienen agua para dar de beber a las aves de postura.

Estrada de la Torre se apoyó en estudios que ha hecho la Universidad de Guadalajara, donde se señala que al detenerse la corriente del Río Verde para llenar la presa El Zapotillo, los mantos freáticos ubicados aguas abajo ya no se recargarían con la misma facilidad, haciendo escasear el agua de pozos.

"Además, según la misma Universidad, para los próximos años se prevé un descenso en las lluvias, de 600 a 300 milímetros anuales; se va a secar el río y no vamos a poder sacar agua de los pozos". Añadió el líder avicultor.

El productor de huevo también reprobó el hecho de que el agua de Los Altos se vaya para León, señalando que en Guanajuato hay al menos 29 presas sobre el caudal del Río Lerma, de las cuales no se permite que descarguen agua hacia Chapala y en el temporal pasado estuvieron al 120 por ciento de su capacidad y aún así los pobladores de aquel estado no permitieron desfogar ni una sola gota para el lago jalisciense, que surte a Guadalajara.

"Ellos (Guanajuato) no dejan que se llene el lago de Chapala y ahora quieren que el Río Verde ya no corra y su agua se vaya a León, pues no, no se puede así", acusó el líder de los avicultores de Tepatitlán.

Pese a que el proyecto original contempla que el agua de El Zapotillo surta de agua a León, Guadalajara y gran parte de Los Altos de Jalisco, Ricardo Estrada no cree que la zona alteña se beneficie de dicho embalse, pues vislumbra que todo se iría para las grandes metrópolis.

24 de febrero de 2014
Fuente: Milenio
Nota de Gustavo González