Houston decide esperar a ‘Ike’ en lugar de escapar

12 septiembre 2008

12 de septiembre de 2008

Houston.- Mientras el tremendo huracán Ike bramaba el viernes en el Golfo de México en dirección hacia la costa de Texas, las autoridades de la cuarta ciudad más grande en Estados Unidos tomaron una decisión inesperada: En lugar de escapar, los habitantes enfrentarán al meteoro.

La población fue instada a proteger ventanas, retirar muebles de terrazas y abastecerse de agua y víveres. Las autoridades también le pidieron que no abarrote las carreteras para evitar los congestionamientos que costaron vidas cuando el huracán Rita amenazó a Houston en el 2005.

“Será, con sinceridad, algo que asustará a la gente'', advirtió el alcalde de Houston, Bill White. “Varias personas de esta comunidad no han experimentado la magnitud de esos vientos''.

La decisión representa un agudo contraste con la forma en que las autoridades de emergencia reaccionaron ante el huracán Rita en el 2005. Mientras el meteoro se acercaba hace tres años, la región aplicó un plan: Evacuar primero a unos dos millones de personas de las comunidades costeras para llevarlas a Houston; Una vez que estuvieran allá fuera de peligro, entonces seguiría Houston de manera ordenada.

Pero tres días antes de que tocara tierra, Rita subió a la máxima categoría 5 y avanzó hacia la ciudad. Las autoridades de la ciudad y del condado de Harris dijeron a los habitantes de Houston que salieran de la ciudad, aunque en ese momento la población de la isla de Galveston atestaba las carreteras. La decisión devino en tragedia: 110 personas murieron durante la maniobra y la evacuación resultó más mortal que el huracán que llegó con categoría 4 y dejó nueve muertes.

A las 0900 GMT, Ike estaba unos 426 kilómetros (265 millas) al sureste de Galveston y se movía al oeste-noroeste a casi 21 kph (13 mph). El huracán tenía la categoría 2 con vientos máximos sostenidos de aproximadamente 168 kph (105 mph). (AP)