Humilla Ariel Cetina a los damnificados

22 agosto 2008

Molestó al funcionario que se hayan quejado de las supuestas anomalías de las casas que Calderón entregó.

Fuente: TabascoHoy
22 de agosto de 2008

El director del Instituto de Vivienda de Tabasco, Ariel Cetina, regañó ayer a los damnificados que se encuentran en un albergue, por haberse quejado de las supuestas anomalías en las casas que el Presidente Felipe Calderón entregó.

"Lo de ayer fue un acto de protocolo en el que se entregan y se hacen las cosas de manera simbólica, pero eso ustedes lo saben y eso lo hemos platicado", les recriminó.

En una reunión que sostuvo con más de un centenar de ellos, el funcionario los cuestionó por haber hecho comentarios "indeseables" y de "mala fe" y además, señaló no entender qué les sucedió para que desconfíen del esfuerzo hecho por los gobiernos estatal y federal para dotarlos de vivienda.

REFORMA publicó que el pasado martes, que luego de que Calderón culminó el evento de entrega "simbólica" de 437 casas del fraccionamiento "Gracias México", los damnificados denunciaron que a la mayoría de ellos no les entregaron las llaves de sus nuevos hogares y en los que encontraron abiertos, se percataron que no contaban con agua ni energía eléctrica.

Ayer, Cetina reconoció faltante regaderas, manares y pastillas para el servicio de luz en sus viviendas, pero pidió acallar "rumores".

"Alguien me dijo por ahí, que la llave que recibió no es la llave de su casa y, efectivamente, son actos simbólicos que hace el señor Presidente de la República de la mano con el Gobernador Andrés Granier, pero eso no quiere decir que las llaves no estén o que las casas no estén listas para recibirlos", aseguró.

Para evitar más reclamos, prometió que ayer por la tarde se les entregaría a todos las llaves de sus nuevos hogares, con la encomienda de que, si por error no corresponden al domicilio, "no hagamos grande lo que no es".

Admitió, sin embargo, que ha recibido quejas de ellos sobre faltantes de tapas de tinaco, llaves del lavadero, regaderas y manerales, como de pastillas para el suministro de luz, pero justificó que esos materiales no fueron instalados en sus viviendas porque corrían el riesgo de que les fueran robados.