Para ello, en esta administración se delineó una estrategia hídrica de largo plazo conocida como Agenda del Agua 2030, para garantizar el acceso universal al agua potable, que los ríos estén limpios, alcanzar el equilibrio en las cuencas y lograr la seguridad de los asentamientos humanos ante fenómenos meteorológicos.

En los últimos años, México, representado por la Conagua, ha sido referencia internacional por su política hídrica de largo plazo e incluso fue inspiración para que los países de América Latina y del Caribe crearan la Agenda del Agua de las Américas, enfocada a la mejora de la gestión de los recursos hídricos de la región para usarlos sustentablemente y contribuir a mejorar la salud y el bienestar de todos.

Para enriquecer aún más esa política del continente, la Conagua aportó el Diálogo Regional de Política de Agua y Adaptación al Cambio Climático en las Américas, un esfuerzo de 21 organizaciones que ha permitido mejorar el entendimiento sobre el impacto directo que tiene el calentamiento global en la disponibilidad del recurso hídrico en nuestro continente. Este diálogo ha dejado plasmadas nueve recomendaciones de políticas públicas, que la Conagua y los demás socios utilizan como guía de sus acciones para afrontar la problemática.

La Agenda del Agua de las Américas, entre cuyos retos está garantizar la universalización del acceso a los servicios de agua potable y saneamiento, contribuye a los esfuerzos de la comunidad mundial de hacer del recurso hídrico un motor de desarrollo para el beneficio de las generaciones presentes y futuras.

La Conagua seguirá impulsando el intercambio de experiencias basadas en los resultados de la Agenda del Agua 2030, en cuya implementación hay logros significativos, pues se ha avanzado en el equilibrio de acuíferos, la rehabilitación de plantas de tratamiento, el aumento de la cobertura de los servicios de agua y la delimitación de zonas federales para evitar asentamientos irregulares.

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Fuente: iAgua.es

07 de octubre de 2012