Los 10 años que le quedan de vida a los animales del río Lerma

06 julio 2011

* En caso de que desaparezca la flora y la fauna del río, también se esfumará la ancestral cultura culinaria

06 de julio de 2011
Fuente: El Universal
Nota de Josué Huerta

Todo apunta a que las especies animales e incluso vegetales que habitan en el río Lerma, que aún alimentan a parte de la población mexiquense, tienen sus días contados. Esto al verse amenazados por la desecación, la contaminación y el crecimiento de la mancha urbana.

En entrevista con EL UNIVERSAL Edomex, el investigador de la Facultad de Gastronomía y Turismo de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM), Carlos Viesca González, indica que desde 1950 a la fecha este afluente ha perdido el 50 por ciento de su fauna, la mayoría comestible, nutritiva y de valor histórico.

Los factores de la devastación

Pero ¿por qué desde 1950? El académico explica que ese año fue en el que empezó a funcionar el “Sistema Lerma” para llevar agua al creciente Distrito Federal, lo que provocó la disminución gradual pero a la vez drástica del caudal y con ello las especies vegetales y animales que cohabitaban en él.

“La gente dependía de los alimentos que le proporcionaban el río y de la venta de los mismos, por ello tuvo que realizar otras actividades para vivir y ya no depender del Lerma, se hicieron agricultores, ganaderos, se fueron a las industrias, especialmente la textil”, señaló en entrevista.

Sin embargo las fábricas que llegaron también contribuyeron, al igual que la creciente población, a descargar aguas residuales que hasta el momento contribuyen a deteriorar el afluente.

Carlos Viesca González quien terminó recientemente la investigación La Gastronomía Indígena del Alto Lerma expone que producto de la desecación y la contaminación del afluente ha disminuido de 1950 a la fecha en un 90 por ciento el número de habitantes que consumían los animales acuáticos.

“Antes de 1950 eran 22 municipios los que dependían directamente de los suministros del río Lerma, ahora sólo una pequeña parte hasta llegar a ser sólo el 10 por ciento de lo que antes eran”, indica.

Algunas de las especies del Lerma que ya no existen, señala la investigación de Carlos Viesca González, son el ajolote, variedades de ranas, peces y patos de la región.

Expone que de continuar esta devastación las especies del Lerma podrían desaparecer en 10 años aproximadamente.

Lo que aún queda

Las especies que aún quedan, explica, son la rana toro (especie introducida al Lerma y que acabó con las ranas nativas), patos que llegan en verano provenientes de Estados Unidos y Canadá, así como también charales, acociles y peces introducidos.

Carlos Viesca González, explica que cuando elaboró La Gastronomía Indígena del Alto Lerma descubrió que muchas familias que vivían del consumo de la fauna de este río, antes de 1950, se fueron del lugar y así dieron paso a la llegada de foráneos que, sin arraigo, les dio lo mismo descargar sus drenajes ahí y evitar la preservación del cuerpo de agua con todo y fauna y flora.

“Ahora vemos que son los ancianos, que nacieron alrededor del Lerma antes de 1950 o poco después de ese año, los que conservan la gastronomía de esa región, son ellos los que aún producen tamales de pescado, tamales de rana, comen los berros y las papas de agua que crecen de forma silvestre a la orilla del Lerma”.

Señala que algunas de las comunidades donde todavía se consumen estos productos provenientes del río son: Ixtlahuaca, San Pedro Tlaltizapan y San Pedro Tultepec por mencionar los más comunes.

La importancia de hacer una investigación de la gastronomía del Lerma

La Gastronomía Indígena del Alto Lerma empezó por ser una investigación en busca de descubrir la cultura culinaria de los mexiquense que habitan alrededor de este cuerpo de agua, pero funcionó también como una denuncia de lo que está desapareciendo.

Por lo que Carlos Viesca González ahora puede señalar que en primer lugar las autoridades municipales, estatal y federal han sido omisas sobre la realización de proyectos de conservación del Lerma.

Advierte que existen nuevos proyectos viales en la zona, uno de ellos pretende llegar hasta el estado de Morelos, el cual pondría en riesgo la poca fauna que queda.

“Estas investigaciones son importantes porque nos ayuda a entender que estos recursos han sido una fuente de alimentación tradicional durante cientos de años para mucha gente. Y además no ayuda a definir acerca de cómo le podemos hacer para preservar estos recursos, qué podemos hacer para que, estos recursos se sigan consumiendo”, concluyó.

Artículos relacionados
Compartir

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Acceder a agua es un derecho humano, pero hacerlo de forma clandestina es un delito. ¿Qué pasa con el huachicoleo de agua?  ¿Sabes cómo se maneja ese negocio?   ¿Qué sabes sobre el tema?

¡Pon a prueba tus conocimientos en este tema! ¡Y diviértete!

 Ir a la trivia