México en una laguna

15 diciembre 2008

Fuente: EXonline.com 14-Diciembre-2008

Recuperando la memoria histórica, en época de lluvias, todos los lagos del Valle de México se fusionaban en uno solo, de dos mil kilómetros cuadrados.

El Lago de Texcoco era el mayor, y se unía al norte con el Lago de Xaltoca, que a su vez lo hacía con el de Zumpango, arriba de él. Hacia el sur, el de Texcoco se casaba con el Lago Xochimilco, que se hermanaba al este con el Lago de Chalco. México sobre una laguna, dice la canción. De ahí tantas inundaciones en todas estas zonas, donde ahora viven millones de mexicanos.

Al mismo tiempo, al menos 26 ríos desembocaban en este conjunto lacustre. El río Tlalnepantla, el Atizapán, el de los Remedios, el Tacuba, el Mixcoac, al poniente, y al oriente el Texcoco, Coatepec, Chapingo y Tlalmanalco brindaban sus nutridas aguas a la gran cuenca.

Ante las grandes inundaciones, en 1449 Nezahualcóyotl ordenó la realización de canales y diques para evitar que el agua inundara la Ciudad de México; años después y con el mismo propósito, Enrico Martínez promovió el Tajo de Nochistongo; en 1900, Porfirio Díaz inauguró el Gran Canal del Desagüe. A través de éste, las aguas residuales son enviadas al estado de Hidalgo.

Sin embargo, debido al gran crecimiento del Distrito Federal, esas medidas han resultado insuficientes para evitar las inundaciones y el hundimiento, así como la contaminación en las comunidades de Hidalgo.

El programa de rescate impulsado por la Conagua (Comisión Nacional del Agua) disminuirá la sobreexplotación de los acuíferos, con lo que se abatirá el hundimiento de la zona metropolitana. Y es que en 1910, el terreno en el que se asienta la Ciudad de México estaba 1.90 metros arriba del Lago de Texcoco; ahora está diez metros abajo. El hundimiento máximo actual de la capital del país es de 40 centímetros al año y el mínimo de diez centímetros.