Morosos recibirán agua en garrafones, advierte Ebrard

15 mayo 2008

Jueves 15 de mayo de 2008

Por: Alejandro Cedillo Cano

El jefe de Gobierno, Marcelo Ebrard, advirtió que aquellos ciudadanos que no paguen el agua se les cortará el suministro, por lo que tendrán que ir a recoger en garrafones y tambos el líquido a uno de los módulos del Sistema de Aguas del Distrito Federal.
Y es que el mandatario confía en que a finales de mayo se concreten una serie de reformas de ley que permitirán a la administración capitalina suspender el suministro a aquellos usuarios que lo derrochen.
Ayer, al término de la presentación de los nuevos integrantes del Consejo Ciudadano de la Procuraduría Ambiental, Ebrard explicó que hay familias que consumen 917 litros diarios por persona cuando los necesarios son 200.
“Hay una vivienda en donde tenemos registrado un consumo de 917 litros por persona al día, es una casa muy grande, está en la delegación Cuajimalpa, y además deben 52 mil pesos de agua”, comentó.
Pese a ello, el funcionario contó que el suministro no se les puede quitar, ya que es un derecho constitucional. Sin embargo, sentenció que sí podrá cortarlo.
“Las personas que no pagan el agua tendrán que irla a recoger, no se hará la entrega a domicilio”, dijo.
—¿Cómo van a resolver este problemática de que el agua es un derecho y cortarla? —se le preguntó.
—El Sistema de Aguas la suministraría vía garrafones en varios puntos de la ciudad, y tendrían las personas que ir por el garrafón de agua —respondió.
“Entonces no estaríamos haciendo caso omiso de la obligación que la ley nos impone, pero sí que esa persona se tome la molestia de ir por el agua, ya que no la paga”, añadió.
El Ejecutivo local dijo que se tiene que ahorrar en la ciudad un siete por ciento del líquido que se está consumiendo actualmente, debido a que, aseguró, ya no se puede traer agua de otro lugar.
Así mismo, afirmó que el Gobierno de la Ciudad considera sumamente inconveniente ampliar la explotación de los mantos acuíferos.
“Tenemos que hacer ese ahorro. ¿Cómo? Pues de esa manera, sobre todo —insisto—, en el caso de las personas que están consumiendo más de lo que es un promedio razonablemente aceptado en todo el mundo”.