México • El titular de la Comisión Nacional del Agua, David Korenfeld Federman, y del Sistema de Aguas de la Ciudad de México, Ramón Aguirre Díaz, manifestaron que no se puede hablar del hallazgo de un nuevo acuífero en Iztapalapa hasta que se concluyan los estudios hidrogeológicos en 2015.

En conferencia de prensa, ambos funcionarios señalaron que para determinar si el agua encontrada es de un nuevo acuífero que hoy se explota en el valle de México se requiere abrir otros tres pozos para su análisis.

Ambos coincidieron en que para saber la cantidad, calidad, antigüedad y tiempo de durabilidad del líquido que se extrae, a 2 mil 08 metros de profundidad, de un nuevo pozo en la Central de Abasto en Iztapalapa hay que llegar a las rocas calizas “como algo obligatorio”.

No obstante, mencionaron que existe la “posibilidad de que en mes y medio” habitantes de Iztapalapa que no cuentan con agua potable comiencen a recibir el agua, una vez potabilizada, que se extrae de ese pozo.

El jefe de Gobierno del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera, accionó la llave para que el agua gris y de sabor dulce saliera por un tubo.

Dos de esos pozos exploratorios serán abiertos por la Conagua y otro por el gobierno capitalino.

El costo de apertura de cada uno es de entre 70 y 100 millones de pesos, informó Korenfeld Federman.

“Si el acuífero que se encuentra a profundidad no está cerrado, la teoría de uno nuevo no procede, porque se estaría sacando agua del mismo acuífero.”

El funcionario visitó la zona del pozo, acompañado por Mancera, quien afirmó que en caso de que se confirme que es un nuevo acuífero se estaría ante un hallazgo muy importante que resolvería la falta de agua en Iztapalapa.

Esta misma semana, Aguirre Díaz destacó el hallazgo de un acuífero profundo que podría abastecer por 100 años a la Ciudad de México.

Incluso, dijo que en la primera etapa requerirá de casi 500 millones de pesos para su explotación.

Refirió que desde hace año y medio se inició la investigación de la zona acuífera y se encontró que contiene agua de buena calidad, por lo que se iniciarán los trabajos para saber qué cantidad se podrá extraer de manera sustentable.

Aguirre Díaz indicó que se han reunido con la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y con el Instituto de Geología de la UNAM para cuantificar el potencial real y de manera sustentable para 100 años, sin embargo aclaró que eso no significa que sea suficiente para abastecer a la ciudad durante ese lapso.

Precisó que el acuífero profundo no afecta a la capital del país, pues es un manto a casi mil metros de profundidad de arcillas, y adelantó que los estudios para determinar cuánta agua se podrá extraer tomarán hasta tres años, y en una primera parte requerirá una inversión de al menos 500 millones de pesos.

El funcionario capitalino precisó que aún con el hallazgo del acuífero será necesario complementar con otras fuentes internas y externas de abastecimiento, ya que la demanda de agua de la Ciudad de México es alta.

De acuerdo con Aguirre Díaz, el acuífero solo representa una fuente del Distrito Federal para asegurar un abasto, “que hoy por hoy está muy limitado”, de prevención durante las temporadas de sequía.

24 de enero de 2013
Fuente: Milenio
Nota de Francisco Mejía