La Comisión Nacional del Agua confirmó que aun cuando ha levantado más de 37 kilómetros de bordos de arcilla y muros de concreto para proteger de inundaciones a esta ciudad, tiene nueve tramos que no ha podido cerrar por “problemas técnicos o sociales”, donde recurrirá por cuarto año consecutivo a la colocación de costalera.

“Tenemos nueve ventanas que no hemos podido cerrar, ya sea por cuestiones técnicas o por cuestiones sociales”, dijo Jorge Octavio Mijangos, gerente estatal de ese organismo, en un momento en el que río Grijalva está a 25 centímetros de rebasar su escala crítica.

Los “puntos críticos” o “ventanas” fueron publicados por REFORMA, desde el 26 de agosto del año pasado, como parte de un conflicto social que enfrenta desde entonces la Conagua y el Gobierno de Andrés Granier para reubicar a colonos, en los márgenes de los ríos Grijalva y Viejo Mezcalapa.

Todavía el pasado 9 de junio, Mijangos mencionó que eran cinco los puntos y prometió que con la ayuda del Gobierno del Estado, se agilizaría el cierre de esos tramos estimados en 1.7 kilómetros.

Ayer, reconoció que entre las “ventanas”, hay tres localizadas sobre el malecón de la ciudad, que atraviesa el río Grijalva, donde la dificultad son las mismas descargas de aguas residuales y pluviales.

Explicó que ante esa problemática, la Conagua rediseñó sus proyectos y, en tanto licita las obras, tendrá que instalar en esos tres sitios hileras de costales rellenos de arena.

“No nos da tiempo, por eso vamos a tener preventivamente la costalera”, justificó.

Mijangos destacó que el bordo con más confitico es el que se levanta a la colonia Casa Blanca, a orillas del río Grijalva, porque está pendiente de indemnizar a propietarios de viviendas y comercios.

Ello, pese a que el Gobernador Andrés Granier hace 13 meses inició un proceso de expropiación para ese fin y, que el pasado día 9 de junio, su secretario de Asentamientos y Obras Públicas, Héctor López, se fijó un plazo de 45 días para concluirlo.

“Si el Gobernador expropió esos terrenos para apoyar a la Comisión Nacional del Agua a cerrar esa ventana, pues lógicamente ya dio instrucciones de que hay una fecha límite, de que se tiene que salir todo el mundo”, comentó.

Mijangos reveló que en Casa Blanca, además la Conagua recién descubrió una descarga de aguas negras, que requerirá de una inversión adicional para cerrar el tramo del bordo.

Refirió que otra zona de conflicto, es la de Ixtacomitán, donde a orillas del río Viejo Mezcalapa, empresas contratistas construyen un bordo de concreto de 12.5 kilómetros, pero hay unos 900 metros inconclusos por gente que rechaza la oferta de indemnizaciones.

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