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Prevé investigadora colapso ambiental por crecimiento desmedido en Tarímbaro

01 julio 2010

1 de julio de 2010

Fuente: Cambio de Michoacán

Por Humberto Castillo

En un plazo no mayor a diez años y ante el desorbitado crecimiento de la zona conurbada de Tarímbaro, el área presentará un caos y colapso ambiental por la falta de agua y la sobrexplotación del acuífero de la Cuenca de Cuitzeo, prevé la investigadora de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) Campus Morelia, Patricia Ávila García.

Sin embargo, el Comité Municipal de Agua Potable y Alcantarillado de Tarímbaro (Comapat) sólo pronostica insuficiencia de agua en los desarrollos de las partes altas, pues en el resto estima que aún hay agua suficiente para más de 20 años. Actualmente, el organismo opera 14 pozos en la zona conurbada, está por autorizar otros cuatro y en la cabecera municipal hay dos más.

Desde hace 15 años aproximadamente, la cuenca tiene veda a la explotación de pozos, misma que no ha sido respetada ante la necesidad de agua para consumo humano, pese a esto, aunque ya no se deberían hacer perforaciones, los desarrolladores siguen cavando, aún y cuando el agua se encuentra cada vez más profunda y se requiere más energía eléctrica.

Patricia Ávila dice que la limitación de esa zona, que abarca desde Tarímbaro hasta Álvaro Obregón y Zinapécuaro, donde se planea la zona metropolitana y tiene restricción habrá un colapso hídrico. Dijo, que si desde ahora ya empiezan los problemas por la falta de agua, sobre todo en la temporada de estiaje, en diez años el problema se agudizará y la escasez incrementará en altos niveles, sobre todo si se siguen autorizando desarrollos urbanos en un área que no es propicia para más dormitorios habitacionales.

La experta en Desarrollo Urbano y temas de agua, refirió que quien más pierde en la zona conurbada, son los campesinos, es decir, los productores de hortalizas y granos, ya que estos han reducido su territorio para dar paso a la especulación inmobiliaria.

En esta área, como en otras de Morelia, las inmobiliarias obtuvieron tierra barata que era de ejidatarios para convertirla en miles de casas, donde la carencia de servicios es evidente y en las cuales la insuficiencia de agua será un problema grave ante la sobrexplotación de los mantos acuíferos, que sirven de espejo hídrico al Lago de Cuitzeo.

La investigadora señaló que tras la construcción de la presa de Cointzio en Morelia en 1939, la cuenca de Lago de Cuitzeo tuvo un auge importante de aprovechamiento del agua rodada para el riego de cultivos que abastecen a Morelia. Pero este auge sólo duró unos diez años, pues con el tiempo, la capital michoacana utilizó agua de la presa y ensució las aguas que llegan a la cuenca con drenajes.

Sin embargo, tiempo después, además de la contaminación por excremento hubo residuos químicos generados por la industria papelera ubicada cerca de la presa de la Mintzita, lo que dio al traste con el riego de cultivos y hortalizas en los municipios de Tarímbaro y Álvaro Obregón, principalmente.

Aunque en la década de los noventas los pescadores del Lago de Cuitzeo y campesinos de la Cuenca se unieron y protestaron por los residuos de la industria papelera y otras industrias, la empresa se clausuró por un corto tiempo y actualmente no hay quien la frene, dijo la investigadora.

Indicó que en el caso de los nuevos fraccionamientos, sería bueno que se hicieran juntas vecinales como en las comunidades y que ellos manejaran el abastecimiento de agua con los pozos profundos y tanques elevados que tienen, pero se llega el plazo en que es el organismo municipal el que se hace cargo, opera y sobre todo cobra.