República Dominicana: protección de cuencas hidrográficas en línea noroeste

06 octubre 2009

6 de octubre de 2009
Fuente: La Información Digital
Nota de Virgilio Guzmán Guzmán

La Línea Noroeste integrada por las provincias Santiago, Valverde, Montecristi, Dajabón y Santiago Rodríguez, es beneficiaria de las aguas de importantes ríos, arroyos y cañadas de gran valor para la producción agrícola, pecuaria, piscícola, agua potable, y para la existencia de la flora y de la fauna de la región. El río Yaque del Norte es su principal fuente hídrica alimentada por sus afluentes mayores; los ríos, Amina, Mao y Guayubín, procedentes de la Cordillera Central y, de otras corrientes de agua menores nacientes en la Cordillera Septentrional, pero también de consideración. El río Las Lavas es una de estas pequeñas corrientes de agua cuya cuenca debemos preservar.

El río Las Lavas nace en La Calabaza, sección El Limón y desemboca en el río Yaque del Norte, en el Municipio de Villa González, Provincia Santiago. En su cuenca tenemos alturas desde los 120 hasta los 695 metros sobre el nivel del mar. Importantes comunidades rurales reciben los beneficios de esta fuente hídrica y de sus afluentes a través de su utilización como agua potable en los hogares, balnearios, ganadería, y para la preservación ambiental. EL Limón, Las Lavas, Pérez, Macorís del Limón, Higo de Agua, Llano Grande, La Calabaza, Pocilguita y El Aguacate, están dentro de los asentamientos humanos favorecidos por este valioso río.

En el año 2004 la Asociación para el Desarrollo, Inc. (APEDI) y el Instituto Dominicano del Tabaco (INTABACO), iniciaron mediante acuerdo de Trabajo Institucional, el Programa Agroforestal en el río Las Lavas y Cañada Bonita, involucrando a 14 comunidades dentro de la Cordillera Septentrional, municipios de Villa González y Navarrete.

A la fecha, se han sembrado y están en su primer año de producción 420 tareas de tierras de las especies agroforestales aguacate, guanábana, limón persa, y de plantas maderables, beneficiando a 11 pequeños agricultores. Así como también, siembras de plantas en centros educativos, viviendas, en las riberas del río Las Lavas, de arroyos y cañadas. Además, labores de educación comunitaria por medio de eventos de capacitación y reuniones, acerca del valor de los recursos naturales, su cuidado, producción y conservación.

En la actualidad en beneficios de la región, quintales de frutas de guanábana, miles de aguacate y de limón persa se comercializan con rentabilidad, considerando no sólo lo positivo de las ventas de estas cosechas agroforestales alimenticias y medicinales obtenidas en estos terrenos, sino también el valor significativo de la protección al suelo, a las fuentes de agua y al ambiente que estas siembras de vegetales significan.

En esta pequeña cuenca tributaria del río Yaque, todavía observamos la práctica del conuco en terrenos de topografía accidentada, principalmente para esta época o periodo de siembra favorable a los cultivos de ciclo corto como frijol, tabaco y maíz, cultivos de subsistencia alimentaria y humana de campesinos-agricultores nómadas.

Para el bienestar del campo y en este caso para las áreas del río Las Lavas y Cañada Bonita, en la Provincia de Santiago, recientemente se inició el Programa Pago por Servicios Ambiental (PSA), Programa similar al que se desarrolla en otros países de America para protección de los recursos naturales y del ambiente, consistente en estimular económicamente a los agricultores dueños de fincas y parcelas deforestadas y degradadas agronómicamente, para que las dediquen a la siembra y producción forestal, convirtiéndolos en poco tiempo en campesinos agroforestales y forestales autosuficientes económicamente y, defensores a la vez de sus vidas y de su habitad.

De los recursos que genera el uso del agua en la producción de energía eléctrica no contaminante, en los acueductos, irrigación agrícola, turismo y otros, sabiamente se aplicaran para el desarrollo del Programa Pago por Servicio Ambiental, partes importantes de estos recursos, a la reforestación y recuperación de suelos, saneamiento y cuidado de las aguas y del ambiente, a favor de la permanencia satisfactoria de los habitantes, en las Cuencas, Subcuencas y Microcuencas Hidrográficas altas de nuestro país.

La Isla Hispaniola integrada por la República Dominicana y Haití, sentirán o están sintiendo el impacto negativo del cambio climático mundial. Los pequeños programas de protección ambiental como éstos que comienza ahora, permitirán que el déficit alimentario sea menor. La producción de agua sana en nuestras cordilleras es responsable de proveer agua potable, agua para irrigación de cultivos agrícolas, crianzas acuáticas, generación de energía eléctrica, entre otras necesidades exigidas y prioritarias como recurso de vida.

Esperamos que este programa (PSA) sea llevado por las instituciones integrantes del mismo, y junto a APEDI e INTABACO hacia ésta y otras áreas afectadas por siembras de cultivos no recomendables en suelos de laderas de la Cordillera Septentrional, desde Santiago hasta Montecristi.