Resulta caro traer el agua a la capital, dice catedrático

16 junio 2009

Fuente: El Sol de México
15 de junio de 2009
Por Claudia Rodríguez

Ciudad de México.- El gobierno ha emprendido tandas de recorte del abasto de agua en diversas delegaciones del Distrito Federal, mientras la opinión pública debate el tema de si en la ciudad de México debe incrementarse el costo del metro cúbico del vital líquido.

Arturo Ortiz Struck, catedrático de la Universidad Iberoamericana, dijo que traer el agua a la ciudad de México resulta caro para el gobierno y debiera cobrar más para satisfacer los costos, pero las condiciones socioeconómicas no facilitan esto, como tampoco la falta de credibilidad del gobierno entre la sociedad, tan golpeada por la crisis y los gobernantes.

"En cuanto al abasto, el problema es extraerla del subsuelo, alrededor de diez metros cúbicos por segundo, cuando la reinfiltración del agua al subsuelo es en promedio de cuatro metros cúbicos por segundo, un desequilibrio que genera asentamientos diferenciales en toda la ciudad, de los cuales nos enteramos cuando se abren huecos en el suelo".

Subrayó que suena extraño que los funcionarios digan que ya no hay agua en la ciudad de México, "y por otro lado cada seis meses nos inundamos por ser un lugar con un ambiente natural muy acuífero, que hace 500 años era un lago de dos kilómetros cuadrados (hoy la Zona Metropolitana del Valle de México mide mil 500 kilómetros cuadrados)".

Refirió que en la actualidad al Distrito Federal lo abastecen de agua 48 ríos -cuatro de ellos perennes- y si el líquido procede de la parte alta de las montañas éste resulta más fácil de potabilizar y con ese mismo se puede satisfacer la demanda. "Pero por razones políticas, en su momento se decidió obtener 70% del agua de pozos y el resto se saca de los sistemas Lerma y Cutzamala".

Abundó: "el agua, la misma cantidad que llegaba hace 500 años por los ríos -198 en toda la cuenca de México-, conforme pasa por las zonas urbanas se ensucia y luego se va al drenaje, cuyo camino se concentra en Texcoco y Zumpango, Estado de México, para de ahí dirigirse al río Tula y de éste desembocar en el Golfo de México. Prácticamente un sistema de drenaje de un lago de dos kilómetros cuadrados".