Roma será el centro del debate de la falta de agua y el hambre
02 junio 2008lunes 2 de junio, 01:00 AM
Fuente: La Nación
ROMA.- La antigua frase Roma caput mundi , que puede traducirse "Roma, centro del mundo", calza como anillo al dedo. Gracias a la cumbre de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) sobre seguridad alimentaria mundial y los retos del cambio climático y la bionergía que comienza mañana y culminará el jueves, la Ciudad Eterna vuelve a ser protagonista. Para esta conferencia de alto nivel están llegando unos 40 jefes de Estado y 100 ministros, entre ellos personalidades más que conocidas del escenario internacional.
Sin contar a la presidenta Cristina Kirchner, de América latina estarán el mandatario brasileño Luiz Inacio Lula da Silva; el venezolano Hugo Chávez y el boliviano Evo Morales. De Europa, el español José Luis Rodríguez Zapatero -que aprovechará para limar asperezas con su par Silvio Berlusconi, que por su nueva y durísima política inmigratoria fue tachado de racista por miembros de su gobierno-, y el francés Nicolas Sarkozy, más que popular en Italia desde que se casó con la modelo Carla Bruni, nacida en Turín.
De la gran cantidad de jefes de Estado que llegarán de Africa, estará el presidente egipcio Hosni Mubarak, y el de Zimbabwe, Robert Mugabe, que realiza su primera visita al exterior desde las controvertidas elecciones legislativas del 29 de marzo último, en las que su partido fue derrotado.
Pero el mandatario que más ha dado que hablar es el presidente iraní Mahmoud Ahmadinejad: hubiera querido ver al Papa durante estos días, pero tras idas y venidas finalmente trascendió que no tendrá audiencia pontificia. Para evitar problemas diplomáticos, de hecho, Benedicto XVI hizo saber que no recibirá a ningún jefe de Estado extranjero presente para la cumbre.
Más allá de las reuniones bilaterales, en el cuartel general de la FAO -un edificio de típica arquitectura mussoliniana muy cercano a las famosas termas de Caracalla y al legendario Circo Máximo-, los líderes de los 191 países miembros deberán discutir de temas clave: cómo enfrentar el hambre y la malnutrición frente a la suba de precios alimentarios; la escasez de agua y de tierras; el cambio climático; el aumento de las necesidades energéticas y el crecimiento de la población.
En plena crisis alimentaria mundial, no podía haberse elegido mejor momento para discutir de estos temas. Con Brasil en primera línea en la producción de biocombustibles, para los medios italianos es Lula, uno de los primeros jefes de Estado en llegar a esta capital, el gran protagonista. Pero es posible que el mandatario brasileño también sea blanco de protestas de parte de grupos de izquierda que critican su decisión de haberle dado prioridad a los biocombustibles.
"Trae en su valija la rebelión de los agricultores por el aumento de los impuestos sobre las exportaciones de cereales", escribió, en tanto, el diario La Repubblica sobre el inminente arribo de Cristina Kirchner, que pisará por primera vez Italia como presidenta.
La FAO estima que el número de personas hambrientas en 2002-2004 se sitúa en 862 millones, de las cuales 830 millones viven en países en desarrollo. Según el último informe elaborado por la Organización de Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE) y la FAO, los precios de los productos básicos agrícolas se moderarán respecto a los recientes niveles récord, pero en los próximos diez años se espera que su media se sitúe muy por encima de los niveles medios de la última década. El actual alza de los precios golpeará sobre todo a las personas que sufren la pobreza y el hambre, en especial a los compradores netos de alimentos en las zonas urbanas y a los que no los producen en las zonas rurales de los países con escasos ingresos.
Por Elisabetta Piqué
Corresponsal en Italia