Se colocará México a la vanguardia mundial en materia de infraestructura hídrica

01 abril 2009

 

  • Construye la planta de tratamiento más grande de AL
  • Las obras se realizan de acuerdo al Programa de Sustentabilidad de la Cuenca del Valle de México

 

El Financiero en línea

Atotonilco de Tula, Hgo., 4 de marzo.- México se colocará a la vanguardia mundial en materia de infraestructura hídrica con la construcción del Túnel Emisor Oriente (TEO) y de la planta de tratamiento de agua más grande de América Latina.

Esas obras se realizan de acuerdo con el Programa de Sustentabilidad Hídrica de la Cuenca del Valle de México, informó la Comisión Nacional del Agua (Conagua).

Tanto el TEO como la planta de tratamiento comenzaron el año  pasado y son parte del Programa de Sustentabilidad Hídrica que prevé la construcción de seis plantas de proceso de aguas residuales dentro del Valle de México.

Las seis plantas estarán en Nextlalpan a la orilla del Gran Canal, en Zumpango, en Berriozábal, en Guadalupe, en el Vaso de Cristo, y la más grande de México y América Latina en Atotonilco de Tula.

En su oportunidad el subgerente de Reuso de Agua de la Conagua, Ariel Flores, aseguró que con esas plantas se podrán sanear 40 metros cúbicos por segundo, es decir 40 mil litros.

Dicha cantidad de líquido es equivalente al agua residual que se genera en el Valle de México, que comprende el Distrito Federal y municipios del estado de México.

El Túnel del Emisor Oriente desalojará las aguas residuales y de lluvia del Valle de México, y al mismo tiempo también eliminará el riesgo de inundaciones en la ciudad de México.

La obra tendrá una longitud de 62 kilómetros y siete metros de diámetro, la construcción inició ya en los límites del Distrito Federal y el estado de México en la delegación Gustavo A. Madero y terminará en el municipio Atotonilco de Tula, en Hidalgo.

Esa magna obra de la ingeniería hídrica en México tendrá un costo estimado en 13 mil millones de pesos, sin embargo debido al deslizamiento del peso será posible que se tenga que hacer un ajuste.

Detalló que el TEO nace en la lumbrera dos del Río de los Remedios y termina precisamente en donde se construye la planta de Atotonilco, contará con 24 lumbreras y tendrá una capacidad para conducir 150 metros cúbicos de aguas residuales por segundo.

En un recorrido por las obras, el funcionario de Conagua recordó que las grandes salidas del líquido residual del Valle de México son el Río de Cuautitlán o Tajo de Nochistongo que fue la primera salida que se construyó, así como el Gran Canal que descarga al Río Salado.

El especialista de la dependencia aseguró que se cuenta con el Túnel Emisor Central o drenaje profundo que tenía una capacidad para 200 metros cúbicos "y ahorita se ha reducido su capacidad al orden de los 160 metros cúbicos".

En el caso del Emisor Oriente se están construyendo las lumbreras y hay gran avance en lo que es la fabricación de los escudos que servirán para excavar el túnel, expuso.

"De hecho ya está casi terminado uno, se prevé que llegue a mediados de abril para bajarla por la lumbrera cero del TEO, para que inicie la excavación".

Los escudos son una especie de taladro de frente cerrado, que excavan el túnel; en total serán seis tuneleras, se tiene previsto traerlas a partir de abril y en diciembre estaría llegando la última, destacó.

Los escudos se importarán de Alemania y serán propiedad de la Conagua, porque tras un análisis observamos que "el esquema que tenía mejor rendimiento y resultaba más económico era comprarlos en vez de rentarlos", eso facilitará la excavación para terminar a mediados de 2012.

El beneficio que se obtendrá, sobre todo en la zona metropolitana, es evitar inundaciones en toda la parte centro de la ciudad de México, es decir se beneficiará a seis o siete millones de personas que podrían ser afectadas por ese riesgo.

Ahora lo que se hace en la lumbrera cero son trabajos de mejoramiento del suelo donde entrará la tunelera o escudo para que cuando llegue la máquina pueda comenzar a excavar.

Ariel Flores sostuvo que este aparato ingresará por la lumbrera cero del TEO, que tiene un diámetro de 12 metros y una profundidad de 26, zona que se comparte con la lumbrera dos del Túnel del Río de los Remedios.

A su vez la jefa de Proyectos de Calidad del Agua, Claudia Hernández, en entrevista aseguró que la Planta de Tratamiento de Agua de Atotonilco de Tula en Hidalgo y el TEO es un megaproyecto histórico en México y no sólo de la administración actual.

La planta de tratamiento será construida en un terreno de 160 hectáreas, y tendrá una capacidad de 23 metros cúbicos por segundo de aguas residuales.

En dicha planta se tratará más de 50 por ciento de las aguas residuales generadas en el Valle de México, porque en el Distrito Federal sólo se trata seis por ciento de esos desechos de líquidos, detalló.

El agua tratada servirá para regar 80 mil hectáreas del Valle del Mezquital, lo que incrementará el potencial agrícola y saneará los cuerpos y los cauces superficiales que reciben los residuos, y su construcción generará más de siete mil empleos directos e indirectos.

En este caso el agua que salga de la planta de tratamiento no sólo cumplirá con la NOM-001, que establece los niveles máximos contaminantes para las aguas, sino que se plantea un parámetro inclusive mucho mayor para dar agua de mejor calidad.

Lo que se pretende es eliminar todos los agentes patógenos para conservar la materia orgánica y los nutrientes del agua y se garantice que puede ser utilizada para el riego.

Durante el estiaje se garantizará que la totalidad del agua sea desinfectada y destinada al riego, y en época de lluvia, cuando ocurran grandes tormentas, a la mayor cantidad del agua se le dará un tratamiento para descargarla a un cuerpo en mejores condiciones.

Para el tratamiento del agua se utilizarán dos procesos, uno convencional enfocado a una técnica biológica en época de estiaje, y de manera adicional en época de lluvia operará un proceso físico químico con una capacidad de 12 metros cúbicos por segundo. (Con información de Notimex/AYV)

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