México, 27 feb (EFE).- Una aldea campesina mexicana de 600 habitantes logró, en los últimos 12 años, aumentar un 24,36% el suministro de agua con un ambicioso plan ecológico consistente en recuperar manantiales desecados por el cambio climático, informó hoy la organización civil Grupo de Estudios Ambientales (GEA).

La comunidad de Oxtoyahualco, situada en la sierra del estado sureño de Guerrero, una de las zonas más indígenas y pobres del país, comenzó el proyecto tras constatar que en los últimos 50 años disminuía de forma significativa la cantidad de agua en la zona y la "imposibilidad" del Estado para hacer frente al fenómeno.

Para ello constituyeron un comité del agua, integrado por vecinos de la aldea, y solicitaron la asesoría de GEA, explicó el portavoz de esta entidad, Alfonso Morales, en una rueda de prensa celebrada en Ciudad de México.

Desde 1995 hasta 2007 reforestaron el área con especies como el maguey, una planta espinosa autóctona de México de la que se obtiene el tequila, y acondicionaron los cauces de los ríos con presas de pequeño tamaño, construidas de forma comunitaria por los vecinos, para frenar la erosión y crear reservas hídricas.

Como resultado de estas acciones, la comunidad pasó de disponer 275 metros cúbicos de agua a contar con 342, al tiempo que volvieron a manar fuentes que en los últimos 30 años se habían secado.

Todo ello en una región con unas condiciones climatológicas que ocasionan situaciones de sequía de hasta seis meses al año, expuso GEA.

Morales resaltó la importancia de esta clase de iniciativas en México, donde más de la mitad de los acuíferos están amenazados por la sobreexplotación o la contaminación, según los estudios realizados por esta agrupación ecologista.

Según estas investigaciones, los acuíferos más amenazados del país se encuentran en los estados de Guerrero, Oaxaca, Morelos y México, en la zona suroccidental y central del país.

"El problema del agua es la columna vertebral de todos los problemas del México rural", ya que a él se debe que la agricultura no produzca lo suficiente para que los campesinos subsistan y se vean obligados a emigrar, principalmente a Estados Unidos, opinó Morales.