Unicef alerta de la situación de la infancia paquistaní tras las inundaciones

07 diciembre 2010

07 de diciembre de 2010
Fuente: ABC (EFE)

El Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) alertó hoy de que el invierno agravará la situación de los menores paquistaníes afectados por las devastadoras inundaciones de la estación monzónica y aseguró que este año se han registrado 126 casos de polio, frente a los 89 del año pasado.

Estos casos, según advirtió la organización en un informe difundido hoy, son un “enorme” motivo de preocupación para un país que durante los últimos años hizo un significativo esfuerzo para erradicar la polio.

La escasa cobertura en zonas del norte paquistaní con problemas de seguridad, unida a las pobres condiciones sanitarias y la saturación de los servicios médicos a causa de las inundaciones han “exacerbado” esta amenaza para los menores, lamentó Unicef.

“Durante los próximos meses de frío, aumentará el número de infecciones respiratorias” y casos de malnutrición, dos de los mayores motivos de mortalidad infantil, dijo el director regional de Unicef en el Sur de Asia, Daniel Toole.

En el norte paquistaní, donde se desataron las inundaciones a finales de julio, la nieve amenaza con castigar a la población, mientras que en el sur, en particular en zonas de la provincia oriental de Punjab y de la suroriental Sindh, las familias han visto cómo las aguas han ido cediendo mucho más lentamente.

El informe cifra en 9 millones los niños afectados por la catástrofe natural, de un total de 18 millones de damnificados.

Unicef aseguró estar dando agua potable a 2,8 millones de personas a diario y aseguró que 8,2 y 9,2 millones de niños han sido vacunados, respectivamente, contra el sarampión y la polio, aunque su intención es que la campaña llegue a unos tres millones más.

Para asistir a la población, Unicef se propuso reunir 251,1 millones de dólares, pero aún está a 82,1 millones de este objetivo, según recordó.

El organismo detalló que, gracias a su acción, 106.500 niños están acudiendo a centros escolares provisionales en las zonas afectadas y otros 36.500 están incluidos en “programas selectivos de alimentación”.

Según datos del Gobierno paquistaní -algunos de los cuales no coinciden de forma precisa con los de los organismos internacionales-, 1.985 personas murieron y 2.946 resultaron heridas a causa de las inundaciones.

El Ejecutivo cifra en 20,1 millones los damnificados, aunque un portavoz de la Autoridad Nacional de Gestión de Desastres de Pakistán consultado recientemente por Efe constató que las inundaciones han dejado a una buena parte de la ciudadanía en peores condiciones para afrontar el invierno.

En el norte del país, la catástrofe natural golpeó a una población ya castigada por la insurgencia talibán, mientras que en el sur arrasó tierras cultivables, el principal medio de supervivencia para miles de personas. EFE

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