Venezuela: Aguas servidas caen sin tratamiento al Lago de Valencia

08 julio 2011

08 de julio de 2011
Fuente: El Carabobeño
Nota de  Daniel Pabón 

Los dos sistemas de bombeo de la cuenca son insuficientes. (Foto Angel Chacón)

 

Alrededor del 50% de las aguas servidas que se generan en torno al Lago de Valencia no reciben ningún tipo de saneamiento, estimó el ex director regional del INOS, Iván Pérez Castillo, como parte de un diagnóstico de la capacidad de tratamiento y balance de líquido residual que es vertido a la cuenca.

Los dígitos de ambos estados involucrados guardan similitud. En Carabobo, las plantas depuradoras de La Mariposa y Los Guayos totalizan una capacidad estimada de 5 mil 800 litros por segundo, a pesar de que la entidad produce 10 mil 981 litros por segundo de aguas servidas. En Aragua la cifra de generación es de 6 mil 018 litros de aguas negras por segundo, pero el sistema de Taiguaiguay apenas trata 3 mil.

Así, un volumen total de 17 mil litros por segundo (l/s) de agua potable en Carabobo y Aragua se transforman en residuales y, por distintas vías, caen a una cuenca a la que no pertenecen, con el Lago de Valencia como lógico receptor. “La hemos traído de afuera para poder abastecer de agua a la población”, complementó el ingeniero mecánico.

Pao-Cachinche, la fuente de abastecimiento de la Gran Valencia, también sufre las descargas sin tratamiento. Un promedio de 6.677 l/s de aguas servidas de Tocuyito y Valencia corren hacia La Mariposa, una planta con capacidad instalada para sanear 3.800 l/s. Un volumen considerable de 2.877 l/s sigue su camino al embalse, sin tratamiento y por rebose. “Trabaja con una efectividad de 57%”, estimó Pérez Castillo, en el entendido de que el sistema opere al 100%, cosa que fue cuestionada. En el caso de la planta Los Guayos, precisó que mantiene un déficit de tratamiento de 1.036 l/s que también corren contaminados hacia la represa.

“Si el Gobierno no hace nada por aumentar la capacidad, vamos a tener un déficit continuo de tratamiento”, lamentó Pérez Castillo, al tiempo que proyectaba que así se construyeran los colectores prometidos pero incumplidos, persistiría un déficit al menos durante tres años.

Aumento sin control

El problema de las aguas servidas sumado a las aguas de lluvia que entran a la cuenca, configuran la crisis de aumento descontrolado del nivel del Lago de Valencia. “Está en continuo ascenso porque lo que le entra es mucho más de lo que se le puede sacar”, lamentó Pérez Castillo antes de detallar los dos métodos de extracción vigentes: por evaporación y a través de dos bombeos que, sumados, dan 8 mil l/s.

Lo requerido para recuperar el balance perdido es de 24 mil l/s, estimó. “Necesitamos construir un bombeo dos veces lo que existe, sin contar que la población aumentará”.

Pérez Castillo se basó en lo ocurrido el pasado 14 de abril para graficar las consecuencias de un bombeo insuficiente: ese día el nivel del Lago aumentó dos centímetros. Tras concluir que el sistema de bombeo está en capacidad de extraer sólo 0,2 milímetros al día, comentó que serían necesarios diez días para regresar a esa cota.

La dificultad se expande como en progresión aritmética. En 2010 el Lago creció 1 metro y 80 centímetros. “Duraríamos casi 2 años para sacar esa agua”, calculó tras promediar que cada día del año pasado entraron a la cuenca 1 millón 725 mil 500 metros cúbicos de líquido.

“El nivel está, pues, fuera de control. El Lago llegará hasta donde lleguen las aguas de lluvia. No hay capacidad para sacarlas porque todo el bombeo se nos va en lo que llega por aguas servidas”, concluyó el especialista.

Partiendo de que en cinco años y medio el nivel de la cuenca ha ascendido cuatro metros, el experto pudo promediar que el Lago sube 0,73 metros al año. Con fotos, evidenció que desde 2005 y hasta 2010 el caudal ha penetrado hasta 1.300 metros de terreno del sur de Maracay.

El ascenso no controlado de la cuenca arrastra consecuencias como el riesgo de pérdida de vidas y viviendas al sur de Maracay, el principal, además de la contaminación de los embalses. Esto, porque 5 mil de los 8 mil l/s de agua que son extraídos del Lago de Valencia por bombeo los constituye el trasvase hacia Pao-Cachinche vigente desde 2007.

Nació la comisión

La explicación anterior forma parte de la ponencia titulada “Balance hídrico y nivel del lago”, una de las siete conferencias presentadas el jueves en la mañana en el auditorio del Centro de Ingenieros de Carabobo.

Después de cinco meses de investigación, fue realizado en Valencia el primer foro de la nueva “Comisión Pro-Saneamiento de la Cuenca y Control del Nivel del Lago de Valencia”, una forma de analizar desde el punto de vista técnico y científico el problema hídrico en la región, presentó Franklin López, presidente del Centro de Ingenieros de Carabobo además de anfitrión y organizador del evento.

Desarrollaron sus ponencias, en este orden, los ingenieros Iván Acare, Iván Pérez Castillo, Luis Fernando Arocha, Efrén Rondón, Gerardo Colmenárez (quien antes de presentar su tema resumió la presentación de Rafael Dautant, ausente por un viaje a Singapur a un evento de la OMS) y Manuel Pérez Rodríguez.

Conozca en una próxima entrega más disertaciones de este grupo de especialistas.

Necesarios Bs. 898 millones en saneamiento

Para el saneamiento de la cuenca del Lago de Valencia (sólo en el territorio carabobeño) hacen falta 898 millones 584 mil 982 bolívares. El monto total de la inversión requerida estimada, al mes de junio, también es un fruto de la investigación de este grupo de expertos. El encargado de presentar la ponencia “Infraestructura hidráulica” fue Efrén Rondón, ex director de obras hidráulicas de Carabobo. La subcomisión que encabeza detalló cuáles obras no han sido ejecutadas y en qué porcentaje. Lamentó que no existan plantas depuradoras para zonas como Naguanagua, Libertador, Chirgua, San Diego, Guacara y la parroquia Rafael Urdaneta. “Las que hay no tienen la capacidad para soportar todas las aguas negras que pudiesen recibir”. Las obras previstas para el saneamiento del Lago no llegan al 52% de ejecución, estimó el director de Saneamiento Ambiental del Gobierno de Carabobo, Iván Acare, en su ponencia “Antecedentes y situación actual”. Tras un paseo por el sistema hídrico, precisó que existen más de 50 expedientes contra el cierre de granjas porcinas que descargan en el río Chirgua, tributario de Pao-Cachinche.

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