Combatir la falta de agua con modelo matemático

17 junio 2016

El agua se lleva a plantas de potabilización y tratamiento para que esté apta para el consumo humano, señaló el investigador.

En una entrevista con la Agencia Informativa del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), el ingeniero dijo que después de este proceso se lleva a tanques de almacenamiento o regulación, para resguardar el líquido hasta que se utilice.

“El consumo que se realiza en una ciudad no es constante porque en las mañanas o en la madrugada, el consumo de agua es muy poco”, mencionó Jiménez Magaña. “Pero por las mañanas y hasta las dos de la tarde podríamos tener un consumo máximo, para eso sirve el tanque, para tomar de ahí el agua cuando se requiere”, abundó.

El ingeniero señaló que la presión, la cantidad y la calidad son temas que deben considerarse al momento de rehabilitar redes o implementarse en comunidades crecientes o nuevas, a fin de lograr suministrar el agua requerida a los hogares.

“Según la Comisión Nacional del Agua (Conagua), en México tenemos entre 30 y 50 por ciento de fugas. El 30 por ciento del agua se extrae a profundidades cada vez mayores”, refirió. De acuerdo con el investigador, hay dos tipos de fugas, las visibles e invisibles. Las primeras son las más fáciles de identificar, pues emergen a la superficie, mientras que las segundas ocurren bajo la ciudad.

Otro problema es el diseño de las redes de tuberías, ya que según cálculos teóricos y simulaciones se debería usar ciertos diámetros para obtener cantidades y presiones adecuadas, pero esos diámetros no existen. “Es aquí donde nace la idea de crear un diseño óptimo asistido por medio del cómputo bioinspirado”, indicó Jiménez Magaña.

El cómputo bioinspirado traduce las ideas biológicas de series genéticas o cromosomas y transforma la información a números, para dar solución a problemas como la distribución del agua. La relación que la bioinspiración aplica en estos problemas de abastecimiento de agua es, por ejemplo, el comportamiento de las colonias de hormigas.

“Ellas (las hormigas) toman el camino más corto para transportar comida, lo que a medida de tiempo deja un rastro de feromonas haciendo que otras hormigas encuentren dicho camino”, explicó el ingeniero.

“En el cómputo, este rastro de feromona se traduce a números y las hormigas actuarían de igual forma que el agua dentro de las tuberías”, añadió. Éstas técnicas tienen buenos resultados en el pueblo de Cocotitlán, Estado de México, el cual enfrenta problemas de abastecimiento debido a su gran crecimiento poblacional.

“Aplicamos estos logaritmos matemáticos y obtuvimos resultados sobre los diámetros que se debían cambiar y la configuración con que se mejoraría el funcionamiento hidráulico”, aseguró el especialista.

“La solución fue un problema de rehabilitación, es decir, mejorar la estructura hidráulica de forma que se satisficieron las variables de presión, gasto y calidad de agua”, agregó.


17 de junio de 2016
Fuente: Digitallpost

Artículos relacionados
Compartir

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

La escasez del agua y los efectos del cambio climático nos hacen cuestionar nuestros modelos de desarrollo actuales. Entre ellos, el saneamiento, es momento de voltear a ver los baños secos  ¿Cómo funcionan? ¿Qué sabes sobre el tema?

¡Pon a prueba tus conocimientos en este tema! ¡Y diviértete!

 Ir a la trivia